16/11/2010

Conocido por sus interpretaciones en películas como Christmas Tree Upside Down, Dragomir Sholev debuta tras las cámaras con su primer largometraje: Shelter [+lee también:
tráiler
ficha de la película]. El cineasta nos habló después de ganar el premio al mejor director ex aequo en el Festival de Cine Internacional de Bratislava.

Cineuropa: ¿Cuál es el origen de la historia?
Dragomir Sholev: Parte de la historia es autobiográfica y parte es ficción basada en experiencias de vida similares. Cuando yo era más joven, admiraba a un héroe punk que era de nuestro barrio. Yo estaba listo para hacer lo que fuera y estar cerca de él, escuchar qué decía o seguir su conducta, así que sé hasta dónde puede llegar un adolescente para ser como su ídolo.

Trabajó con Razvan Radulescu y Melissa de Raaf en el guión.
Era la primera vez que trabajaba en un guión con alguien. No sabía lo que me esperaba. Trabajando juntos aprendí mucho sobre la escritura para el cine. Fue muy interesante para mí ver cómo una idea puede desarrollarse e interpretarse de dos maneras diferentes. Muchas veces no opinábamos lo mismo y teníamos que parar y discutirlo. Hablábamos en inglés pero escribíamos cada uno en nuestra lengua materna para mantener un diálogo real y auténtico.

La fotografía de Krum Rodriguez tiene un movimiento agitado y fluido. ¿Cómo desarrolló usted el aspecto visual de la película?
No usamos una steadicam como todo el mundo piensa. No fue posible porque tenía programado trabajar con tomas muy largas. Y quería dirigir cientos de ensayos con la cámara. Construimos un sistema especial para mover la cámara. No puedo explicarlo con palabras, pero hizo posible mover la cámara alrededor de todo el plató.

Queríamos recrear la realidad, para lo cual adaptamos el atrezzo, el vestuario, los diálogos y las luces. Por ejemplo, la acción transcurre en un típico bloque de pisos de la época comunista llamado panelka. Por lo general, los pisos son muy pequeños con techos bajos. La única luz que hay durante el día es la que entra por las ventanas. Entonces Krum decidió iluminar el plató solo con las ventanas. Fue arriesgado a nivel de la fotografía pero dio realismo a la imagen.

¿Qué le parece el estado actual de la producción cinematográfica en Bulgaria?
Por lo general, yo soy optimista, pero ahora veo que Bulgaria se encuentra en una situación difícil. El gobierno ha reducido la financiación a la mitad, con la única excusa de que no hay dinero. Para los directores, sin embargo, no hay alternativa. Esta es la única película financiada por el país. Cuando no tienes el apoyo nacional, es muy difícil buscar una coproducción en el extranjero.

Creo que hay una nueva generación de directores en Bulgaria que han hecho películas de éxito pero tienen que enfrentarse a la burocracia administrativa y a la ausencia de prioridad cultural en el gobierno. Esperemos que podamos usar este momento crítico para crear otras posibilidades alternativas de financiación como fondos suplementarios.

¿Cómo vas estrenar la película en Bulgaria?
Estamos pensando en fijar el estreno para marzo del próximo año. Creo que esta película podría encajar muy bien en cines pequeños independientes o alternativos. Desafortunadamente, en Bulgaria no tenemos este tipo de cadenas de cines, así que necesitamos estrenar la película en un multicines de un centro comercial.