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CANNES 2024 Semana de la Crítica

Nada Riyadh, Ayman El Amir • Directores de The Brink of Dreams

"Estas chicas desafían a la tradición"

por 

- CANNES 2024: Los directores egipcios siguen a un grupo de teatro callejero formado por mujeres que es, y siempre ha sido, duro de pelar

Nada Riyadh, Ayman El Amir • Directores de The Brink of Dreams

Un grupo de chicas egipcias hablan sobre sus problemas y esperanzas en The Brink of Dreams [+lee también:
crítica
tráiler
entrevista: Nada Riyadh, Ayman El Amir
ficha de la película
]
, presentada en la Semana de la Crítica de Cannes. Creen en la acción social y forman una compañía femenina de teatro callejero, proclamando en voz alta lo que otros ni siquiera se atreven a pensar. Lamentablemente, también deben enfrentarse a la dura realidad. Los directores Nada Riyadh y Ayman El Amir nos cuentan más detalles sobre su película.

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Cineuropa: Las chicas de la compañía Barsha siempre interactúan con el público. Les señalan y les hacen todo tipo de preguntas personales. ¿También se comportaron así con vosotros?
Nada Riad:
Por supuesto. Era bidireccional. Nos preguntaban y respondíamos con sinceridad, pero no incluimos nuestras respuestas en la película. Se trata de ellas y de sus historias. Las conocimos cuando colaborábamos con un instituto feminista de El Cairo que apoya a las mujeres en el mundo de las artes, especialmente en comunidades marginadas. Viajamos al sur del país, descubriendo diferentes colectivos artísticos. La primera vez que las vimos, estaban en mitad de una actuación callejera. Creo que fue en 2017, y desde entonces nos mantuvimos en contacto. Siempre que estábamos en el sur, pasábamos a visitarlas. Un año después, nos pidieron que fuéramos a proyectar nuestra primera película [Happily Ever After] en el pueblo.

Ayman El Amir: Por aquel entonces, no sabíamos mucho sobre ellas, solo las conocíamos a través del teatro y éramos conscientes de que estas chicas desafiaban a la tradición. A partir de ahí, poco a poco, empezaron a introducirnos en su mundo y el de sus familias. No tienen ninguna educación teatral formal. Utilizan sus instintos y su experiencia para construir sus actuaciones.

El desarrollo de esta película llevó mucho tiempo. Para nosotros, la clave es generar confianza y una relación con las protagonistas, con sus familias y, básicamente, con todo el pueblo. Quieres tener acceso a ellas, pero también formar parte de su vida cotidiana. Al principio, eran muy conscientes de nuestra presencia y la de la cámara, así que también fue una cuestión de paciencia. Aun así, tengo que decir que la parte más difícil de todo este proceso fue el montaje. Cuando filmas durante más de cuatro años, acabas teniendo cientos de horas de metraje. Cada tres minutos que ves son el resultado de tres horas filmando.

A veces es evidente que su público se escandaliza con sus palabras. ¿Se les ocurren a ellas estas historias? ¿O la cámara les hizo sentirse más valientes?
N.R.:
La cámara permite a la gente enfrentarse a algunos aspectos de su vida, pero en este caso afectó a sus trayectorias personales más que a su arte.

A.E.A.: El principal reto era rodar todas estas cosas asegurándonos de que podíamos desaparecer. Cuando estás rodeado de tanta gente, es difícil ser invisible. La gente te mira, posan ante la cámara. Por eso las chicas tenían que acostumbrarse a nuestra presencia. Son el único grupo femenino de teatro callejero que existe actualmente en Egipto. Son, y siempre han sido, duras de pelar. Se preguntaban si el cine podría utilizarse también como herramienta de expresión, como herramienta de cambio, porque el teatro les permite sobrevivir. Sin el teatro, no pueden expresarse: es una parte orgánica de su existencia. Se consideran artistas y tienen grandes sueños. Una quiere estudiar en El Cairo; otras quieren ser cantantes o bailarinas.

Con este tipo de películas, no puedes evitar esperar que todo salga bien. Sin embargo, sus familias no siempre apoyan lo que hacen, e incluso los hombres jóvenes repiten comentarios hirientes. ¿Sentíais que debíais mantener la esperanza, pero también ser realistas?
A.E.A.:
Cuando estás tan cerca de tus protagonistas, tienes que esperar el mejor desenlace. Al mismo tiempo, hay que mantener las distancias. Hablamos de patriarcado, y el patriarcado no siempre permite un final feliz.

N.R.: También tiene que ver con el capitalismo, porque muchas veces hemos oído decir: “Si no ganas dinero de verdad, no es arte”. Es un argumento diseñado para mantenerlas a raya, para mantenerlas en “su lugar”.

Seguís planeando trabajar con las chicas, y estáis desarrollando una campaña de impacto que les dará otra excusa para actuar, pero imagino que no fue fácil seguir adelante una vez acabada la película, ¿verdad?
A.E.A.:
Es nuestra segunda película, así que ya estamos acostumbrados. También es difícil para ellas. ¡Básicamente vivíamos juntos! Seguimos manteniendo una relación, aunque no nos veamos tan a menudo.

N.R.: Para mí sigue siendo muy emotivo. Quizás porque también se trata de soltar la película.

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(Traducción del inglés)

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