16/05/2009

Tessa tiene nueve años, no va mucho al colegio y deambula por una zona rodeada de inmensos postes de alta tensión en los cuales trabaja el compañero de su madre. Dos adultos que casi no se ocupan de las extrañas distracciones de la niña: recoger todo lo que le cae en las manos y reorganizarlo en la lógica de su mundo imaginario. Un retrato social y humano dramático de esta familia que vive en una barraca aislada cerca de Ostende realizado por la belga Caroline Strubbe que ha sido presentado hoy en la Semana Internacional de la Crítica.

El guión que describe la precaria felicidad de la pareja compuesta por Bettina (Lisbeth Gruwez) y Markus (Sam Louwyck) ha sido escrito por la misma realizadora. Szabolcs (Zoltán Miklós Hajdu), un inmigrante húngaro muy cualificado está secretamente enamorado de Bettina y verá caer la desdicha sobre este trozo de tierra triste y estas almas ya destruidas por el destino.

Sumergida en un áspero realismo, rodada principalmente con la cámara al hombro y con atención casi obsesiva a los rostros, Lost Persons Area [+lee también:
tráiler
ficha de la película] se revela una constatación despiadada de la desgracia que reina en el universo de los trabajadores menos favorecidos, estos seres invisibles en los límites de la sociedad. Algunos momentos de alegría fugaz (un abrazo, un paseo a caballo o por la ciudad) iluminan un relato que baña en una atmósfera de malestar amenazante y de soledad desesperada. En esta lucha existencial cotidiana, los tres intérpretes principales dan lo mejor de ellos mismos, logrando hacer que sus personajes sean interesantes gracias a una interpretación sobria. Un laconismo que es también el del mundo ultra masculino de los obreros que la realizadora representa con precisión, al igual que elabora un retrato muy conmovedor de Tessa (Kimke Desart), una niña perturbada, sin referencias paternas al margen del amor desgarrador de una madre incapaz de transmitirle una estabilidad y ofrecerle un futuro en el cielo y la vida de Lost Persons Area.

En competición por la Cámara de Oro, la película ha sido producida por la compañía belga Minds Meet y Artemis Productions, en coproducción con ZDF/Arte, la holandesa De Productie y la húngara Uj Budapest Filmstudio. Entre otras, ha recibido las subvenciones de Eurimages, el Vlaams Audiovisueel Fonds, el Centro de Cine y Audiovisual de la Comunidad Francesa de Bélgica , el Nederlands Filmfonds y el Rotterdam Filmfonds. El agente de ventas internacionales es la compañía francesa Umedia.

(Traducción del francés)