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BERLINALE 2010 Competición / Dinamarca

A Family sumerge Berlín en una viva emoción

por 

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, tercer largometraje de Pernille Fischer Christensen, que fue premiada por partida doble en la edición 2006 de la Berlinale con A Soap [+lee también:
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, a pesar de ser una de las últimas películas de la Sección Oficial en competición, provocó un extraordinario impacto emotivo durante el pase para la prensa, donde abundaban los ojos lúcidos, incluso entre los integrantes del equipo de la cinta en la conferencia que tuvo lugar a continuación.

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A Family retrata con impresionante sinceridad y honestidad a varias generaciones de una familia de panaderos, con especial atención sobre la enfermedad de Rikard Rheinwald (Jesper Christensen, que perdió 16 kilos durante las seis semanas de rodaje), padre de cuatro hijos, y sobre su relación con su hija Ditte (Lene Maria Christensen). La película comparte varias temáticas con otras cintas del certamen berlinés, como la familia y las decisiones asociadas a ella, y logra sublimarlas a través de los inefables límites del amor incondicional, gracias a la sensible y naturalista fotografía de Jakob Irhe (cuyo trabajo fue descubierto por la realizadora en Reprise [+lee también:
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, de Joachim Trier, y en su carrera en el género documental).

Ditte, decidida a abortar el hijo concebido con el hombre que ama por motivos profesionales, no duda en cambiar de idea por su padre, cuya preocupación principal es la perpetuidad de su panadería (el pan se convierte en una metáfora del sustancial tuétano de la vida). Los personajes, todos importantes, representados en su fragilidad con una precisión íntima pero no invasiva (que pasa por una observación atenta de sus cuerpos, rostros y gestos), sacan toda su fuerza y su significado de la identidad del hogar (la panadería no aparece nunca). La elección del formato cinemascope no es casual: Pernille Fischer Christensen no quería excluir nada de la imagen e incluir a toda la familia.

A Family es más que la historia de una familia, es una declaración de amor universal. La intención se refleja allí: Pernille (junto al brillante y prolífico guionista Kim Fupz Aakeson, también autor de la película noruega en concurso A Somewhat Gentle Man [+lee también:
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) quería hablar de la familia de manera dulce, que pusiera cómodo al espectador, “como una caricia”, y por esto ha ideado este íncipit con forma de álbum de familia con leyendas escritas a la mano.

De hecho, por su lenguaje cinematográfico, por la sinceridad de su propósito, la realizadora logra tocar la fibra, presente en cada uno de nosotros, del amor indecible, inmenso y conmovedor, que une a las familias.

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(Traducción del francés)

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