08/03/2010

El año pasado los islandeses inundaron las salas en busca de algo que les entretuviera mientras el país vivía una de las peores crisis económicas de su historia. Así, la afluencia general ascendió un 7%, hasta los 1,6 millones de espectadores, y la afluencia media per capita se estableció en un récord de 5,3, tres veces por encima del nivel de la UE, según Iceland Cinema Now (ICN), que utilizó datos de la asociación del gremio SMAIS.

El cine islandés consiguió mantener una cuota de mercado estable de aproximadamente el 10%. La película más taquillera del año fue la comedia estadounidense Resacón en Las Vegas (60.569 espectadores, SamFilm), seguida por la sueca Millennium 1: Los hombres que no amaban a las mujeres [+lee también:
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ficha de la película] (51.862 espectadores, Sena). Harry Potter y el Misterio del Príncipe [+lee también:
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ficha de la película] se hizo con la tercera posición con 48.596 espectadores (Samfilm) mientras que la oscarizada Slumdog Millionaire [+lee también:
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entrevista: Danny Boyle
ficha de la película] se situó en la séptima posición con 38.760 espectadores (Myndform).

La comedia Jóhannes, de Thorsteinn Gunnar Bjarnason, fue la película local más taquillera (36.417 espectadores, Myndform). Asimismo, la comedia de Ragnar Bragason Mr Bjarnfredarson (SamFilm), una adaptación al cine de la serie The Prison Shift que se estrenó a finales de 2009, consiguió hacerse enseguida con la segunda posición de la clasificación de cine local con 65.996 espectadores en diez semanas.

De las doce películas islandesas estrenadas en 2009, seis fueron documentales y dos de ellos funcionaron bastante bien: Dreamland, de Thorfinnur Gudnason y Andri Snaer Magnason (16.213 espectadores), y Sunshine Boy, de Fridrik Thor Fridriksson (13.586 espectadores).

(Traducción del inglés)