08/10/2014 - El centro publica un detallado estudio del impacto positivo de los dispositivos fiscales franceses, comparándolos con los sistemas equivalentes de otros seis países europeos

Los créditos fiscales del cine, audiovisuales, internacionales y de los videojuegos: estos cuatro dispositivos fiscales han sido el centro de un análisis en profundidad dirigido por el CNC, que también ha publicado un instructivo estudio comparativo sobre los mecanismos equivalentes en Europa (Bélgica, Luxemburgo, Alemania, Irlanda, Hungría y Reino Unido) y en Canadá. 

El crédito fiscal de cine ha beneficiado a aproximadamente la mitad de las películas realizadas por iniciativa francesa desde el 2004, representando un 7,8% del coste total de estas obras. Con un total de 42,2 millones de euros en 2013, ha permitido una relocalización de los rodajes en el territorio francés, con un impacto positivo en el empleo y en la diversidad de la producción. Pero este mecanismo beneficia también a las arcas del estado con 129 millones de euros de recaudación estimados, generados el año pasado por los 491 millones de euros de inversiones en obras que han contado en el país con el crédito fiscal de cine. Por cada euro pagado como crédito fiscal de cine, se han invertido 11,6 euros en la industria y 3,1 euros de recaudación fiscal y de la Seguridad Social han sido percibidas por el estado. 

El balance también es favorable en cuanto al crédito fiscal internacional con las inversiones en territorio galo en alza (110 millones de euros el año pasado) para las obras que se han beneficiado de él, y unas recaudaciones por parte del estado estimadas en 41,4 millones de euros en 2013, tras los 15,6 millones acordados en tal crédito fiscal. El mecanismo también tiene consecuencias muy positivas en la actividad de las industrias técnicas francesas, en la proyección de las compañías de animación y efectos especiales, y en la atracción turística de Francia en el mundo.

Por último, el CNC ha publicado un estudio comparativo de los sistemas de incentivos fiscales a la producción cinematográfica, audiovisual y de videojuegos en Europa (Bélgica, Luxemburgo, Alemania, Irlanda, Hungría y Reino Unido) y Canadá. Este análisis de mecanismos fuertemente heterogéneos y de modalidades muy diversas muestra que el crédito fiscal  francés es menos atractivo que sus "competidores" en cuanto a criterios estrictamente financieros (límites e inversiones elegibles) y que también es casi incompatible con los demás dispositivos (excepto con el tax shelter belga y los créditos fiscales canadienses). El crédito fiscal francés solo representa un 7,9% en 2013 del coste de producción de las películas de iniciativa francesa realizadas, en contraposición al 11,4% del dispositivo irlandés, el 12,2% del alemán, el 18,9% del taxshelter belga, y el 27% de Canadá. 

Los estudios (en francés) se pueden descargar desde la página del CNC: "Evaluación de los dispositivos de créditos fiscales", "Estudio comparativo de los créditos fiscales en Europa y Canadá", "¿Cómo funcionan los créditos fiscales?".

(Traducción del francés)