10/10/2016 - Daniel Castro Zimbrón transciende los tropos clásicos del terror y eleva su película por sobre la oferta cinematográfica presente con una atmósfera permanentemente oscura

El segundo largometraje del mexicano Daniel Castro Zimbrón, titulado Las tinieblas [+lee también:
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ficha de la película], puede describirse bien como una muestra de terror posapocalíptico atmosférico, y, aunque presenta una cabaña en el bosque, muñecas terroríficas y máscaras de gas, no se trata de una mera mezcla de tropos del género. Tras su estreno en L'Étrange Festival el mes pasado, la cinta acaba de proyectarse en la competición internacional del festival de cine de Varsovia.

Middle-aged Gustavo (Brontis Jodorowski, que parece llevar sobre sus hombros toda la intensidad del primer cine de su padre) vive en una vieja y solitaria casa en el bosque con sus dos hijos, Marcos (Fernando Álvarez Rebeil), apenas salido de la adolescencia, y el adolescente Argel (Aliocha Sotnikoff), así como con su hija pequeña, Luciana (Camila Robertson Glennie). Siempre está oscuro en la casa, pues el bosque cubre los alrededores con una niebla perpetua. Y parece que un monstruo merodea afuera: cada cierto tiempo se escucha un aullido, los árboles empiezan a temblar a pesar de la ausencia de viento y largas sombras se proyectan contra las ventanas. En esos momentos, Gustavo se encierra con sus hijos en el sótano.

Sin embargo, la familia tiene que comer, así que Gustavo y Marcos se ponen máscaras de gas, toman sus rifles y salen de caza. Al cabo de la primera salida, Gustavo regresa sin Marcos diciendo que la bestia lo atrapó. Después agarra una botella y orden a Argel que prepare de comer.

Mientras tanto, la pequeña Luciana pasa la mayor parte de su tiempo en su cama, en una esquina del sótano, dibujando en un cuaderno y tosiendo, fruto de una fiebre que no termina de abandonarla. Argel y Luciana mantienen una estrecha relación y Gustavo parece cariñoso pero también muy estricto. Tiene un candado en la puerta de su habitación y prohíbe a los niños entrar. 

Para Argel, la naturaleza de este mundo apocalíptico y la supuesta presencia del monstruo no parecen encajar con la desaparición de Marcos y empieza a sospechar de su padre.

Las tinieblas es, en efecto, muy oscura y la mayor parte de la acción transcurre en la oscuridad. La cinta avanza lentamente, apoyándose con fuerza en la atmósfera y dejando un amplio espacio a la imaginación hasta la ambigüedad del final. Su enfoque es bastante original en lo que se refiere a las premisas clásicas pero tal vez pueda resultar demasiado críptica. Aún así, se destaca de la oferta existente de terror y fantasía en lengua española.

Las tinieblas es una coproducción entre las mexicanas Varios Lobos y Zoología Fantástica y la francesa Les Films de L'Etranger. Memento es su agencia de ventas internacionales. 

(Traducción del inglés)