Three Peaks, una lucha por el poder en las Dolomitas
por Giorgia Del Don
- LOCARNO 2017: El segundo largo del joven cineasta berlinés Jan Zabeil es un drama psicológico de alta tensión con una tríada atípica de protagonistas
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tráiler
entrevista: Jan Zabeil
ficha de la película], una cinta ambientada en las alturas montañosas con una tríada atípica de protagonistas: una madre (Léa, interpretada por la francesa Bérénice Bejo), su hijo de ocho años, Tristan, y su nueva pareja, Aaron (Alexander Fehling), por quien dejó al padre de su hijo.
El marco en que se mueve este trío de personajes, que alternan momentos de complicidad y de incomprensión absoluta, es el de las Tres Cimas de Lavaredo, en las Dolomitas italianas, paisaje majestuoso que se ha proyectado en todo su esplendor en la pantalla de la Piazza Grande de Locarno. Todo un acierto, pues la imponente visualidad de esta cinta necesita espacio para ser realmente apreciada en toda su gloria.
Léa, Tristan y Aaron se recluyen en una pequeña casa alpina en un intento de fortalecer sus lazos lejos de las presiones familiares (el padre de Tristan solo se manifiesta a través de recurrentes llamadas de teléfono a su hijo) y las presiones sociales a las que cada uno se enfrenta.
Aunque inicialmente la ambientación montañosa aporta una cierta nota bucólica —casi surrealista en su belleza—, a medida que pasa el tiempo y se desarrollan sentimientos entre Tristan y Aaron, el fondo también parece transformarse de manera sutil y casi ilusoria. Entre el neo/seudo-padre y el neo/seudo-hijo, se establece una peligrosa lucha por el poder, una danza malévola y sádica en la que se refleja la ambivalencia de los sentimientos que les atan.
La modernidad de este drama de Zabeil reside en la representación, en toda su complejidad, de la reconstrucción de una familia. La relación entre Tristan y Aaron se transforma (en el verdadero sentido de la palabra) en un viaje a paso tambaleante.
La tensión palpable que domina la película se percibe de principio a fin, y la obra se mueve con soltura por la línea que separa lo plausible y lo melodramático. Como dos perros que se husmearan el uno al otro, tratando de marcar su territorio, los dos protagonistas —apoyados por una madre y pareja que se pone de parte de ambos en diferentes momentos— se llevan mutuamente al límite, antes de descubrirse al borde del abismo. ¿Qué hacer cuando se desmorona la certidumbre que entraña una familia tradicional? ¿Cómo suplir el vacío dejado por una persona que todavía existe? A pesar de su aparente dureza, Aaron parece perderse en el imponente paisaje montañoso como una aguja en un pajar. Al final de la cinta, y a pesar del carácter casi sobrehumano del protagonista, lo único que queda en pie son las milenarias cumbres Dolomitas.
Three Peaks es una producción de Rohfilm Productions (Alemania) y Echo Film (Italia) junto con SWR. The Match Factory se encarga de las ventas internacionales.
(Traducción del italiano)
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