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PELÍCULAS / CRÍTICAS Estados Unidos / Italia

Crítica: Rivales

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- La nueva película de Luca Guadagnino protagonizada por la estelar Zendaya, sobre un triángulo amoroso ambientado en el mundo del tenis, está definitivamente dirigida al gran público

Crítica: Rivales
Mike Faist, Zendaya y Josh O’Connor en Rivales

Ventaja, servicio, falta, break, juego en blanco... Las palabras del tenis son un espejo de nuestra existencia. Y es que, tal y como dijo Andre Agassi en su autobiografía —por no decir Biblia— Open: Memorias, "cada partido constituye una vida en miniatura". Luca Guadagnino se sirve de este enfoque metafórico en su nuevo trabajo, Rivales [+lee también:
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, que se estrenará el 24 de abril en Italia y, a partir de esa fecha, en el resto del mundo. La película, de cuya distribución se encargará Warner Bros Pictures, consiste en la escenificación de una relación sentimental hetero-homosexual a tres bandas y el desarrollo de la historia de los protagonistas a través de una serie de flashbacks y flashforwards —que pondrán en peligro la integridad del cuello de los espectadores— por los no-lugares en los que se mueven los deportistas: campos de juego, habitaciones de hotel, aparcamientos... En definitiva, lugares en los que competir, como sugiere el título original de la película (Challengers), que a su vez hace referencia a los torneos que ayudan a los tenistas a ganar los puntos necesarios para acceder al ATP Tour.

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La película se inicia en 2019, con el enfrentamiento entre Art Donaldson (Mike Faist, que interpretó el papel de Riff en West Side Story, de Spielberg) y Patrick Zweig (el actor británico Josh O'Connor, protagonista de la película del año pasado La quimera [+lee también:
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) en la final del Challenger de New Rochelle, a unas semanas del inicio del US Open y bajo la atenta mirada de la esposa y entrenadora de Art, Tashi Duncan (Zendaya, que viene de Dune: Parte Dos). Donaldson, que ha ganado seis Grand Slam, trata de recuperar la forma para el US Open —el único Grand Slam que se le resiste—, pero se encuentra en el final de su carrera y solo continúa porque le empuja Tashi, con quien forma una pareja de poder que cuenta con el apoyo de patrocinadores millonarios. Zweig es un tenista que no ha tenido una gran carrera, tiene las cuentas bancarias en números rojos y se ve obligado a dormir en el coche antes de los partidos, pero que, aun así, tiene la esperanza de entrar en el cuadro principal. Los tres se conocen desde hace 13 años, desde la época en que Tashi tenía una carrera muy prometedora por delante y los dos chicos, que jugaban juntos a dobles, eran uña y carne —en cuanto se conocieron, se gustaron—. En la escena del trío en la cama, que se incluyó en el tráiler y entusiasmó a los fans de Zendaya, esta detecta un vínculo entre los dos chicos que va más allá de la amistad y la intimidad de vestuario. Dice que no quiere convertirse en una fuente de "problemas en el paraíso", pero promete dar su número de teléfono a quien gane un reto. Patrick se lleva el gato al agua al ser el más sexy según Tashi —francamente, en términos de sensualidad, O'Connor gana a Faist por 6-0 6-0—, pero es un tipo con una vida irregular e inquieta, un hombre condenado a la soledad. Una lesión de rodilla pone fin a la carrera de Tashi, que se acaba casando con Art, con la idea de poder utilizarlo para cumplir todos los sueños que el destino le ha negado. Art no cumple con las expectativas de su mujer, que acaba odiándole y cayendo de nuevo en brazos del perdedor Patrick en un juego de atracción y repulsión.

La filosofía de Tashi puede resumirse en una de las frases que pronuncia en la película: "El tenis es una relación". El guionista Justin Kuritzkes demuestra una gran habilidad para esbozar a esta joven manipuladora que no ama otra cosa que el tenis, que proyecta sus ambiciones frustradas en su marido y que, en última instancia, pierde el control del triángulo sexy (en sus intercambios con la prensa, Zendaya ha marcado claramente las distancias con su personaje y ha pedido que no la juzguen). Kuritzkes y Guadagnino no profundizan demasiado en la psicología de los tres personajes. En su lugar, el director de Call Me By Your Name [+lee también:
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destaca la sensualidad de sus cuerpos y rostros, donde se mezclan el deseo, el antagonismo y los celos, a menudo acentuados por tomas a cámara lenta de gotas de sudor y por las técnicas de filmación de Sayombhu Mukdeeprom, que rozan la parodia (una pelota de tenis como foco principal o tomas desde debajo de la superficie de la pista, que se hace parecer transparente). La música tecno de Trent Reznor y Atticus Ross palpita con fuerza en el fondo de las interpretaciones de los actores. Esta película del pupilo de Bernardo Bertolucci, en la que también participa como productora la estrella estadounidense Zendaya, puede resultar irritante para los puristas del tenis, pero no por ello será menor su éxito en los multicines de todo el mundo.

Rivales es una coproducción italiano-estadounidense de Amazon MGM, Why Are You Acting?, Pascal Pictures y Frenesy Films.

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(Traducción del italiano)

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