Deportada a Auschwitz justo antes de cumplir 20 años, Hélène conoce allí a Lili, una neerlandesa, y a Rose, una francesa. En el campo las tres mujeres se ayudan para sobrevivir, pero tras su liberación se dispersan. De regreso a París, Hélène conoce al amor de su vida, también marcado por las heridas del campo. 15 años más tarde, Hélène se encuentra con Lili, quien le propone pasar una semana juntas en Berck-sur-mer, en el norte de Francia, donde Rose se unirá a ellas para un ritual que repetirán todos los años.