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Gabriel Achim • Director

La sátira trasciende la historia

por 

- El director, guionista y productor rumano habla sobre su ópera prima, Adalbert’s Dream y cómo se ve la historia rumana desde la perspectiva actual.

El director, guionista y productor habla sobre su ópera prima, Adalbert’s Dream, los diferentes formatos de rodaje y de formas narrativas, la sátira presente en su película y cómo se ve la historia rumana desde la perspectiva actual.

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está basada en una historia real?

Gabriel Achim: Leí sobre un accidente en una enorme fábrica comunista en los años 80. Un trabajador había perdido una mano y otro, al que se le pidió que reconstruyese lo sucedido (algo común en aquella época), terminó por perderla también. Esta historia tan cruda es por desgracia real. Pero por otro lado me brindaba una oportunidad excelente para escribir un guión sobre lo absurdo de aquellos años. Fue además un modo para cuestionar y explorar lo que había descubierto sobre los “accidentes” provocados por un director de cine cuando reconstruye la realidad.

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¿Por qué decidiste ambientar la película justo después de desastre de Chernobyl y la victoria del Steaua de Bucarest en la Copa de Europa?
Sin duda, podía haber ambientado la historia en la actualidad, algo que habría gustado a muchos rumanos, que dicen ver muchas películas sobre la época comunista (aunque en realidad no creo que haya más de cinco películas sobre ello). Pero yo no soy uno de los que cree que no se ha conseguido exorcizar toda la desazón del pasado.

La historia real sucedió en los años 80. Elegí el 8 de mayo de 1986 porque fue uno de los días más raros de nuestra historia reciente. El desastre de Chernobyl había pasado dos semanas antes y la gente aún hablaba sobre las posibles consecuencias. El día antes, el Steaua Bucarest ganó la Copa de Europa contra el Barcelona. La gente estaba emocionada, nadie creía que el Steaua podía ganar a los gigantes del Barcelona en su propio campo. Pero, por otro lado, el 8 de mayo era el aniversario oficial del Partido Comunistay las autoridades estaban decididas a capitalizar todo el entusiasmo en su celebración. En las cantinas, teatros, colegios y demás, todos tenían que participar en la celebración del Partido. Para darte una idea del ambiente, el periódico deportivo hizo una pequeña mención al resultado final y las alineaciones de cada equipo en la última página. Eso es todo lo que se habló de esa fantástica victoria, el resto de páginas se centraban en el Partido Comunista.

Sin ánimo de exagerar, fue una de esas cosas excepcionales que dio esperanza a la gente normal bajo el régimen comunista. Esperanza en lo imposible, en que una fuga del infierno moral y político era en realidad posible.

¿Por qué elegiste concentrar gran parte de la atención de la película en los diálogos?
Creo que no es sólo una cuestión de texto, sino también de textura. La textura del medio cinematográfico se ha convertido en un tema de interés por varias razonas. La historia gira en torno a la cámara de vídeo clandestina que el protagonista lleva consigo para poder ver la gran victoria del Steaua con sus compañeros de trabajo. Intentamos reconstruir la realidad monocromática y despiadada del comunismo de los años 80 en VHS, con un enfoque parecido al del cine documental y deconstruir la mentalidad colectiva de su gente. Además, el protagonista es un cineasta y algunos ejemplos de su trabajo están presentes en el metraje.

Sobre el texto, mi percepción personal sobre los años 80 en Rumanía es que las cosas sucedían sólo en círculos reducidos. Vivíamos de modo pasivo, oíamos muchas historias y nunca sabíamos identificar la línea que separaba la realidad de la ficción. Lo que es más, el tiempo parecía ir a cámara lenta y el único “entretenimiento” que nos quedaba era contar y escuchar sin parar historias o chistes. Sólo había un canal de televisión, que emitía durante un par de horas al día y no hablaba de otra cosa que de los grandes logros de Ceausescu.

¿Cómo se ve la sátira de la época de Ceausescu y la inmediatamente siguiente en Rumanía, sobre todo en el seno de la Nueva Ola Rumana?
Cada vez hay más rumanos nostálgicos del comunismo. Tienden a pensar que fue una buena idea mal llevada a cabo. La sátira es uno de los antídotos más eficaces para el olvido y tiene una función universal en la película, ya que trasciende la historia que narra.

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