22/12/2009 - Encuentro con el joven cineasta flamenco en las oficinas parisinas de MK2, su distribuidor en Francia

Cineuropa: Después de dos guiones originales, tu tercer largometraje es una adaptación.
Felix Van Groeningen: Cuando comencé a hacer películas, no podía imaginar que algún día iba a dirigir el guión de otra persona o una adaptación de un libro. Escribí mi primer largometraje solo, pero me parecía difícil y quise compartir la escritura del guión de mi segundo largometraje. Hacer una adaptación no era sino un paso suplementario. Escribir un guión requiere demasiado tiempo y buscaba la manera de poder rodar más rápidamente.

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¿Por qué elegiste el libro de Dimitri Verhulst?
Conocía al autor y me gustaba mucho su estilo. Cuando leí La merditude des choses [+lee también:
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entrevista: Felix van Groeningen
ficha de la película], al principio pensé que era imposible adaptarlo, demasiado anecdótico, una sucesión de borracheras. Pero los últimos capítulos aclaran el conjunto: se comprende que el personaje principal ya no está en su pueblo, que su padre murió y que va a convertirse en padre él mismo sin tener ganas. Lloré cuando vuelve a casa de su abuela y le agradece: había que llegar a ese punto en la película. Quería que se comprendiera porque el personaje se ha vuelto cínico. La estructura de la película tomó mucho tiempo. Me gusta jugar con el tiempo, con una gran historia que entra en una pequeña historia, idas y venidas que no siguen la lógica, sino las emociones.

Una historia familiar. Realismo social. Tragicomedia. ¿Cuál es tu punto de vista de la cinta?

Es un conjunto. Intenté dar humanidad a los personajes. Es la historia de alguien que se aleja de un medio social, pero que a pesar de ello no se salva. Está solo, triste, odia el mundo y su vida. Hay mucho pesimismo, pero todo se ilumina cuando encuentra su sitio en la vida y entonces vuelve a su pasado, vuelve a ver a su familia. Es un largo recorrido de veinte años con un lado muy alegre y mucha destrucción.

¿Has ensayado mucho con los actores antes del rodaje?
Es mi método. Mientras escribo el guión, comienzo a hacer el casting y empiezo rápidamente los ensayos para ver qué aportan los actores a los personajes. También vi documentales con los actores, en particular Les Aventures de la famille Debecker, sobre una familia pobre que vive en una casa muy pequeña pero en un muy buen ambiente.

¿Cuál era tu objetivo desde el punto de vista visual?
Quería un caos organizado, mucha energía. Pero hay que tener cuidado de no ir demasiado deprisa, si no el espectador se pierde. La energía es indispensable, pero es necesario también saber qué planos se quieren. Mi director de fotografía participa en los ensayos, los filma, sugiere ideas de dirección. Luego miramos las imágenes y tomamos fotografías del vídeo para hacer nuestro montaje.

¿Cuáles son tus principales influencias cinematográficas?
Siempre tengo una o dos películas que me siguen por períodos de algunos años y que veo diez - veinte veces. Las cintas que veo por el momento son De latir, mi corazón se ha parado [+lee también:
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ficha de la película], de Jacques Audiard, e Y tu mamá también, de Alfonso Cuarón.

La Quincena de Realizadores de Cannes, una buena trayectoria comercial en Bélgica y ser representante de tu país para el Oscar. ¿Qué te supone este éxito?
¡Es fantástico! Mi segundo largometraje fue apreciado por la crítica, pero en las salas su trayectoria no fue más allá de lo que suele lograr el cine de autor flamenco. Me alegra sobre todo que el éxito haya llegado con esta película, ya que comprendo que debo simplemente seguir haciendo películas y no comenzar a soñar.