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Guillaume Malandrin • Director

"Una determinada exigencia de cine"

por 

Después de haber realizado estudios en el INSAS en sección Imagen,Guillaume Malandrin realiza Qui déménage? en 1992 luego Bonjour en 1995. En 1999, Raconte, es seleccionado en Berlín y en Sundance. Acaba de terminar su primer largometraje en DV y prepara el rodaje de otro largometraje. Encuentro con uno de los realizadores-guionistas-productores de La Parti Production.

Cineuropa: ¿Por qué este deseo de auto-producirse?
Guillaume Malandrin: Es posible adquirir muy rápidamente determinada autonomía de producción. Entonces, hicimos esta elección de manera a poner las prioridades donde lo deseábamos. Tenemos nuestra red, conocemos técnicos, y el savoir-faire. Y luego, teníamos los mismos gustos cinematográficos y referencias. Todo es asunto de montaje de personas y energías. Después de Todo Films, con Vincent Tavier, creamos La Parti Production con Philippe Kauffmann y Stéphane Vuillet, lo que nos permitió pasar al nivel más alto. Un lado colegial y anárquico nos une y también una determinada exigencia de cine, libertad, simplicidad...

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¿Tiene sus propios proyectos de realización?
Acabo de terminar un largometraje de 68 minutos rodado en DV el año pasado, Ca m'est égal si demain n'arrive pas con Olga Grimberg y Jacky Lambert, la historia de un hombre que sale de prisión y que encuentra a su hijo de diez años que creció en una familia de adopción. Su gran sueño es ir de vacaciones con este niño a quien no conoce. En el momento de partir, encuentran a la madre, que se ha convertido en otra persona, y deciden ir a tres. La película describe una semana de la vida de esta gente, que son como extranjeros en la misma pieza.

¿Lo ha co-escrito con su hermano [Stéphane Malandrin] ?
Sí, y con Jacky Lambert. Partimos de un texto dialogado de 30 páginas. La idea era hacer una película muy simple con una historia simple. Lo rodamos en dos semanas. Era un rodaje muy ligero, éramos ocho con los actores. Me ocupé de la producción, la intendencia y la organización.

¿Piensa estrenarlo en sala?
Lo envié a Locarno. Espero una respuesta. Espero mostrarlo para tener reacciones. Deseo que esta película encuentre a su público. Y también estoy preparando el rodaje de Où Où est la main de l'homme sans tête [+lee también:
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ficha de la película
]
co-escrito con mi hermano, Stéphane. Por mi parte tenía ganas de realizar un thriller y comenzamos a divertirnos en torno a esta historia.

Hablando de thriller, prevé Où est la main... como una película de género?
Es una película de género en el sentido que hay escenas de suspenso, de tensiones que no voy a poner en cortocircuito yendo contra el espíritu de la escena. Pero no es mi objetivo. Tengo referencias pero eso no me interesa jugar y el cine de género siempre hace referencia a algo. Raconte era una historia bastante clásica, con una estructura narrativa bastante compleja. Où est la main... se aparenta con una historia y personajes más reales, más densos. Como realizador, lo que me interesa en el cine, es una forma de emoción.

Este proyecto fue seleccionado en el Cinémart en Rotterdam este año. ¿eso ayudó a aumentar la financiación de la película?
Sí, pero eso sobre todo nos permitió concretar las cosas. Ya habíamos explorado muchas pistas enviando el guión a toda clase de casas de producciones, distribuidores y vendedores internacionales. Se terminó el proyecto en Rotterdam con la inversión de Wild Bunch. Muchos productores alemanes se interesaron por el proyecto a causa de la presencia de Ulrich Tukur. Los vimos en Berlín y si debemos ahora trabajar con Alemania, volveríamos hacia Lichtblick Film y Joachim Ortmanns. Pero, esperamos las respuestas de Luxemburgo. Y si no tuviéramos respuesta positiva, será necesario ir seguramente a ver del lado de Alemania.

¿Cómo Cécile de France y Ulrich Tukur llegaron al proyecto?
Cécile de France está presente desde hace tres años y medio. La encontré en el momento en que acababa de terminar la película de Cédric Klapish, Una casa de locos. Desde ese momento, su carrera despegó pero siguió siendo solidaria con el proyecto que le gustaba mucho. La película cuenta una relación padre-hija, Eva, a quien interpreta, una campeona de de natación y su padre, que es también su instructor, Ulrich Tukur. Lo habíamos visto en Amen y en La cuchilla [+lee también:
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. Al principio, quería a un anglosajón, me gustaba la idea de alguien un poco inmigrado en Bélgica, que no tenga familia, que esté un poco aislado. Ella se integró pero él es aún un poco extranjero. Es el arquetipo de una familia que triunfó y este éxito social es la única cosa que los haya cementado.

¿Cuál era la prioridad en el deseo de hacer esta película?
Había varios deseos, particularmente las ganas de hacer actuar a Jacky Lambert. Y también me gustan las historias familiares cuando las relaciones deberían ser evidentes y no lo son, que lo familiar está un poco destruido y debe probar que existe. Si hay amor y que la familia está unida hay una especie de confianza absoluta que es natural, en la cual se basa, se construye. Cuando esta relación se agota, se convierte en una pesadilla. Es la historia de la película. En un momento dado, esta muchacha, por una razón que le es propia, no tiene ya confianza en su padre. Piensa que le quiere hacer daño. La película cuenta algo terrible: tener miedo que su padre la mate, se construye a partir de este fantasma de muerte, para realizar algo positivo .

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