28/06/2010

Los espectadores del Festival de Cine de Bruselas han podido descubrir este fin de semana el nuevo trabajo del otro hermano Kaurismaki, Mika, The House of Branching Love [+lee también:
tráiler
ficha de la película]. Considerado como un ovni cómico en el seno de la competición, esta farsa excéntrica relata en tres tiempos un enredo de embrollos, en un tipo de encuentro improbable a orillas de un lago finlandés entre La guerra de los Rose y las obras de Shakespeare. Mientras que su hermano Aki utiliza el humor seco, Mika Kaurismaki no vacila en lanzarse de lleno a la comedia ligera exagerada.

Juhani y Tuula han superado la treintena, y están casados (demasiado) tranquilamente. Deciden divorciarse razonablemente, y, un poco menos razonablemente, compartir su luminoso hogar hasta que encuentren un comprador. La regla básica de convivencia amistosa (ningún amante bajo el techo conyugal) es rápidamente transgredida, y es el principio de una guerra psicológica que se convierte en un enfrentamiento físico. Difícil de resistir a la avalancha de insultos y golpes bajos que los dos futuros ex esposos se asestan sin tregua, pero rápidamente Kaurismaki rodea a la pareja de una corte de personajes secundarios que diluyen un poco la fuerza de la narración.

Vuelven a protagonizar la cinta los dos actores fetiches de Aki, Kati Outinen (que interpreta a una madre de lo más macarra) y Kari Vaananen (en el papel de padre conmovedor pero indigno). Los matones son concienzudamente feroces, los jóvenes galanes reglamentariamente bellos, los acólitos abundantemente retorcidos, y después de haber hecho estallar las bases de la pareja, todo acaba arreglándose, si es posible en un trigal bajo el sol naciente.

The House of Branching Love cosechó un rotundo éxito en Finlandia, atrayendo a más de 145.000 espectadores, lo que la coloca en la segunda posición de la taquilla nacional del año pasado. Esta producción 100 % finlandesa no tiene previsto por el momento su estreno en Bélgica.

(Traducción del francés)