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PELÍCULAS / CRÍTICAS

Pál Adrienn

por 

- Un juego de pistas contradictorias a lo largo de un laberinto de recuerdos idealizados en el segundo largo de una prometedora directora húngara, presentado en Cannes en 2010

Hace cuatro años, Fresh Air [+lee también:
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convirtió a Agnès Kocsis en una de las cineastas más prometedoras de la nueva generación del cine húngaro. La mirada precisa y analítica que ya había caracterizado su ópera prima vuelve a encontrarse en su último trabajo tras las cámaras, Pál Adrienn [+lee también:
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, que forma parte del programa de la sección Una Cierta Mirada del festival de Cannes.

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Pál Adrienn es una historia sobre la idealización del pasado, una de esas idealizaciones que suelen surgir en tiempos complicados cuando uno se enfrenta con una realidad sofocante de la cual parece no saber salir. En el caso de Piroska, esa idealización se cristaliza en una persona, Adrienn Pál, su mejor amiga en la escuela primaria, cuyo rastro perdió hace más de 20 años.

Lejos de los tiempos en que compartía todos sus secretos y juguetes con Adrieen, Piroska es actualmente una treintañera obesa que trabaja como enfermera en los cuidados paliativos de un hospital. Incapaz de llamar a los familiares de los pacientes cada vez que alguien fallece, un día Piroska se encuentra con el nombre de una recién fallecida, Adrienn Pál. No se trata de su amiga, pero ¿qué habría pasado entonces con la Adrienn Pál de su infancia? Poseída por una súbita nostalgia, Piroska decide investigar. Así, al cabo de una larga introducción contemplativa a la vida deprimente de la enfermera, empieza por fin el relato de esa búsqueda.

Firmado conjuntamente por Andrea Roberti y por la directora, el guión encadena consultas a antiguos vecinos, compañeros de colegio y profesoras, mientras apunta pistas contradictorias y perspectivas contrarias a los recuerdos de Piroska. Poco a poco, el fantasma de Adrienn Pál empieza a tomar formas inciertas: era una niña enferma (o no…), se portaba bien (o no…), era la mejor amiga de Piroska (o no…); existió de verdad (o no…). Las ambigüedades sobre este personaje fantasma podrían fácilmente haber convertido este relato en una película de misterio, pero más que solucionar el dilema, lo que interesa a Kocsis es filmar todo el proceso de forma detallada y como contrapunto a su protagonista. Cada nueva cita enfrenta a Piroska a realidades diferentes de la suya: amigos que se han hecho ricos, matrimonios más felices que el suyo, premisas que parecen indicar la idealización de una persona que probablemente solo existió de manera tan perfecta en su propia memoria de niña adulta desilusionada con la existencia. La actriz Eva Gabor, más que interpretar a esa mujer en busca de la infancia, la habita, la incorpora, se apodera de su nostalgia y miseria.

A toda esta precisión en la estructuración del guión y la sutileza del retrato psicológico de la protagonista acompaña una puesta en escena contemplativa y un pausado ritmo de montaje. Se introducen elementos sonoros y musicales tan diferentes como arias de ópera, canciones de Karaoke o el ritmo cardiaco de los pacientes del hospital que añaden un tono irónico, falsamente trágico o puramente angustioso a todo este ensayo sobre el relativismo de la memoria.

Pál Adrienn es una producción entre KMH Film, Cinéma Defacto, Freibeuter Film y Isabella Film. Elle Driver gestiona las ventas internacionales.

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(Traducción del francés)

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