16/01/2013 - El director francés Edouard Deluc firma un primer largometraje cuyos mayores logros son sus personajes y su invitación a viajar con ellos.

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tráiler
entrevista: Edouard Deluc
ficha de la película] es el primer largometraje del francés Edouard Deluc. Con esta película, el director pone fin a una larga aventura que comenzó con su propio cortometraje ¿Dónde está Kim Basinger?, origen de esta coproducción entre Francia, Bélgica y Argentina seleccionada fuera de concurso en la 4ª edición del festival de cine europeo de Les Arcs, donde recibió una cálida acogida por parte del público. Esta road movie avanza sobre la indolencia (y la enología práctica) de Entre copas, permitiendo que la comedia dramática desemboque en la feel-good movie sin que se resienta su finalidad, se trate de un problema de depresión o de psiquiátrico.

Es fácil resumir la historia. Marcus lleva a su hermano pequeño Antoine a Argentina para asistir a la boda de su primo, en la provincia de Mendoza. Antoine padece una depresión desde que lo dejó con su pareja y a Marcus tampoco es que le vaya mucho mejor. Para estos hermanos frágiles que se dejaron llevar hasta que perdieron la relación, esta odisea se convertirá en un viaje iniciático.

Welcome to Argentina constituye, en primer lugar, una oportunidad para aventurarse en el paisaje argentino, filmado con el ojo maravillado de un director que consigue confesar, a través de la imagen, su devoción por el país. En segundo lugar, la cinta es una declaración de amor de Edouard Deluc por el actor Philippe Rebbot (Marcus), que borra la frontera entre intérprete y personaje en un papel emocionante que le va como anillo al dedo. A su lado, más que la interpretación más comedida de Nicolas Duvauchelle (Antoine) o de Paloma Contreras (la despampanante latinoamericana Gabriela), disfrutamos de un Gustavo Kamenetzky que vuelve a encarnar al recepcionista del corto original y que convierte a Gonzalo en un resorte cómico tan divertido como bienvenido. Cabe destacar asimismo la presencia del músico y actor Benjamin Biolay en la parte final de la película, dotando de una credibilidad inmediata a su personaje, el primo francés instalado en Mendoza.

Gracias a sus puntos fuertes (la alquimia de los personajes, los paisajes, la música de Herman Dune, la agradable ligereza de sus temas), Welcome to Argentina recorre la linealidad del guion respetando los códigos de la road movie por etapas sin arriesgarse a dar la sorpresa pero ganando su apuesta por divertir y por llegar, con sencillez, al corazón.

(Traducción del francés)