11/04/2003

Se ha dado a conocer oficialmente la regla que autoriza un máximo de 300 butacas en las salas de los nuevos complejos multiplex en Francia. Se trata de una modificación al reglamento de ley, aprobado el pasado 3 de abril por el parlamento con la satisfacción del ministro de Cultura, Jean-Jacques Aillagon.
Fijado hasta hoy en 800 butacas, el límite máximo autorizado había generado numerosas discusiones por parte de los empresarios de cine franceses a causa del desarrollo en los grandes centros comerciales (centros Leclerc en particular) de complejos multiplex más pequeños, capaces de eludir los permisos acordados por las comisiones departamentales de instalaciones cinematográficas (CDEC). Debatido ampliamente el pasado mes de septiembre en Niza durante el 57º congreso de la Federación Nacional de Cines Franceses, la amenaza contribuyó a la constitución de un frente unido de empresarios, y Jean-Jacques Aillagon mostró su rechazo a que los grandes centros entraran en este sector.
Al final se han encontrado soluciones: bajar el límite máximo para los nuevos multiplex para evitar que se desestabilicen las salas vecinas y para que los nuevos operadores, que actúan fuera de la reglamentación, no ocasionen que el cine se transforme en un producto meramente comercial alejado de su carácter de elemento cultural. La nueva ley aumenta también los controles a la expansión. Los complejos multiplex podían aumentar hasta 1.500 el número de butacas tras 5 años de actividad sin pasar por el CDEC; un paso automático que ahora es imposible sin la autorización de las comisiones.

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(Traducción del francés)