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TESALÓNICA 2015

Blind Sun: Marcas de quemaduras en Grecia

por 

- El primer largometraje de Joyce Nashawati juega de manera impresionante con los artificios del género en un intenso drama personal acerca de las relaciones sociales

Blind Sun: Marcas de quemaduras en Grecia
Ziad Bakri en Blind Sun

Lo que en un principio parece un thriller modesto, con grandes dosis de tensión y suspense, se transforma rápidamente en la antesala de un escenario postapocalíptico, donde Joyce Nashawati consigue desplegar un denso drama acerca de las dinámicas sociales, firmando un impresionante debut. La película en cuestión es Blind Sun [+lee también:
tráiler
ficha de la película
]
, y está siendo proyectada en la sección Greek Panorama del Festival Internaional de Cine de Tesalónica.

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Un extranjero de unos 40 años, que malvive a base de trabajos ocasionales, termina en la villa de una familia de expatriados, la cual debe vigilar mientras la familia en cuestión está de viaje en Francia. Sin embargo, un encontronazo con un antipático oficial de policía encargado de localizar inmigrantes puede suponer un gran problema en los planes del protagonista, que debe sobrevivir a una ola de calor extrema mientras que la escasez de agua empieza a desolar la isla, por culpa de una empresa privada que se ha hecho con los recursos naturales del lugar.

Moviendo estos engranajes de forma impasible, Nashawati representa el desorden mental de su protagonista, causado por el insoportable calor, e intensificado por la creciente amenaza de un cerco policial inminente. Al mismo tiempo, recrea una atmósfera constante de inquietud social, provocada por las relaciones entre el sector privado y el gobierno corrupto, que fomentan el odio entre los propios oprimidos.

Rodada de forma magistral por el veterano director de fotografía Yorgos Arvanitis (colaborador habitual de Theo Angelopoulos), la cinta sumerge al espectador en su ambiente sofocante, donde la nitidez de las imágenes contrasta con las difuminadas líneas que separan la realidad y la paranoia.

La solemne interpretación de Ziad Bakri en el papel protagonista mantiene altos los picos emocionales de la historia, y el pulso firme de Nashawati guía al espectador a través de las transformaciones constantes de su película, incluso cuando la narración comienza a perder fundamento de cara al final de la cinta.

Seleccionada por las francesas GLP Production y TBC Production después de que la productora local de Blonde SA, Fenia Kossovitsa, presentase el proyecto en el Forum Crossroads de Tesalónica en 2011, la película fue proyectada como un Work in Progress al año siguiente, antes de su estreno en la actual edición del festival.

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(Traducción del inglés)

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