Hanne confía sus dos hijos a su padre y ex-marido, Nizar. Él dice que quiere llevarlos a Euro Disney, en París. En lugar de eso, se los lleva a su casa de Siria. A partir de ese momento, Hanne comienza una cruzada y luchará durante dos años para conseguir que sus hijos vuelvan a los Países Bajos. Durante toda esta terrible experiencia, Hanne es constantemente asaltada por las dudas acerca de lo que ella debería hacer y la mejor forma de actuar.