Kevin acaba de llegar a un centro de detención de menores. Debido a la superpoblación del centro, Kevin se ve obligado a compartir la celda con Tommy, Andy y Marc, en una convivencia que se encuadra en un sistema dominado por la violencia, la opresión y la constante agresión, donde solo los más fuertes prevalecen. Kevin tendrá serias dificultades para adaptarse y aguantar, más aún cuando Marc y Andy van a por él. Solo Tommy le dará un consejo de amigo: allí, o se es una víctima o se es un verdugo; si no quiere acabar así, hay que empezar a pelear...