La atractiva Annika dirige junto a su madre una escuela de baile fundada por su abuelo durante la Segunda Guerra Mundial. Un día conoce a un silencioso electricista llamado Lasse. A pesar de que el hombre le confiesa que fue - injustamente según el - condenado y encarcelado por violación, Annika se enamora apasionadamente de él, a pesar de unas llamadas anónimas que le cuentan que Lasse abusó brutalmente de una mujer, y a pesar de las continuas explosiones de ira de éste. Los intensos, aunque breves momentos de felicidad que Annika disfruta en los brazos de su impulsivo amante, están acompañados de sospechas cada vez más intensas de que Lasse le oculta una parte oscura de su pasado.