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Nicolas Winding Refn • Director

“El arte es un acto de violencia”

por 

- Nicolas Winding Refn desvela algunos secretos de la estilizadísima y sombría Sólo Dios perdona

Acompañado por la actriz Kristin Scott Thomas, la productora Lene Borglum, el montador Matthew Newman y el compositor Cliff Martinez, y poco después de que Thierry Frémaux, delegado general del festival de Cannes, leyera un mensaje de agradecimiento de Ryan Gosling, que se encuentra trabajando en Detroit en el rodaje de su primera película tras las cámaras, el director danés Nicolas Winding Refn reveló a la prensa internacional algunos de los secretos de la estilizadísima y sombría Sólo Dios perdona [+lee también:
crítica
tráiler
making of
entrevista: Nicolas Winding Refn
ficha de la película
]
, presentada como parte de la competición oficial.

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Lo que las primeras notas de producción de la película indicaban, que la cinta iba de un hombre que quería luchar contra Dios, terminó siendo una tragedia griega en Asia.
Nicolas Winding Refn: Firmé un acuerdo con Gaumont y Wild Bunch para hacer dos películas de bajo presupuesto; la primera de ellas ha terminado siendo esta historia de peleas en Tailandia. No soy fan de la lucha pero estaba pasando por una fase existencialista en mi vida en la que no conseguía canalizar mi ira. Pensé que la única respuesta posible era Dios y que debía retarlo. No obstante, necesitaba una historia más lineal, así que añadí una madre devoradora, una relación entre madre e hijo y un personaje que se toma por Dios. A continuación, trabajé en Drive, dejando a un lado Sólo Dios perdona. La agenda de Ryan Gosling nos obligó a retrasar el rodaje algunos meses, durante los que seleccionamos a Kristin Scott Thomas y, acto seguido, fuimos a Tailandia. Fue una experiencia interesante de la que ha resultado la obra sobre la realidad y el misticismo que pretendía, después de constatar que la espiritualidad tiene connotaciones distintas en Asia.

¿Cómo abordó el tema de la espiritualidad?
El guion original era muy lógico y daba muchas explicaciones sobre el misticismo. En Occidente, nos interesamos más por los hechos concretos. Después de pasar un tiempo en Asia, descubrí que la definición de viaje constituye un viaje de por sí. La cinta presenta las diferencias entre el paraíso y el infierno.

¿Por qué dedicó la película a Alejandro Jodorowsky?
Jodorowsky siempre ponía en su cine todo tipo de criaturas mitológicas. Hace algunos años, tuve la oportunidad de conocerlo y se convirtió en un amigo. Siempre me ha fascinado su lenguaje cinematográfico, más allá de toda convención. Quería hacer algo distinto después de Drive, Bronson y Valhalla Rising. Fui a ver a Jodorowsky a París, le pregunté cómo podía llegar a hacerlo, hablamos y me dio confianza.

Ryan Gosling no tiene apenas diálogos y los personajes de Chang y de Crystal cobran una gran importancia. ¿Por qué?
La idea del personaje de Julian es la de un hombre comprometido en una especie de viaje cuyo fin desconoce. Está atado a su madre por cadenas invisibles: una forma de maldición de la que solo puede liberarse mediante un alto grado de violencia. Le dije a Ryan Gosling que hiciera como quisiera, y el idioma del silencio tal vez resulta más poético. Al final, en la película, uno se pregunta no quién es, sino quién no es. Hay imágenes subliminales por todas partes y toda una dimensión en off de la realidad.

¿Cómo trabajó el movimiento y el espacio?
El movimiento es esencial para un actor, al igual que el vestuario. Tras Drive, queríamos que Ryan Gosling siguiera con nosotros y diese otro giro de tuerca a sus desplazamientos, como si fueran los de un sonámbulo que avanza de manera extraña, como flotando. En lo que respecta al personaje de Chang, debíamos imaginar cómo caminaría Dios si estuviese entre nosotros. Hay muy poco diálogo, mientras que en nuestros tiempos estamos acostumbrados a hablar mucho e intercambiar información rápidamente. En cuanto al espacio, me gusta la profundidad de campo y trabajar el segundo plano.

¿Cómo se justifica la violencia extrema de la película?
El arte es un acto de violencia; habla a nuestro inconsciente. No le doy muchas vueltas a la cabeza. Mi forma de trabajar es un poco la de un pornógrafo: me interesa aquello que me excita. Nuestro nacimiento nos empuja a la violencia. Luego la oprimimos un poco con el paso de los años, pero necesitamos expresarla de algún modo y el arte es una manera de hacerlo. 

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