04/03/2015 - Cineuropa ha conversado con Antonio Russo Merenda, film commissioner de cine documental del SFI, cuyo fondo para la financiación de documentales ha sido multiplicado por dos

Klara Grunning y Antonio Russo Merenda han sido nombrados film commissioners del sector de cine documental del Instituto de Cine Sueco (SFI), en sustitución de Cecilia Lidin. Grunning tomará posesión de su nuevo cargo en septiembre de 2015. El apartado dedicado a financiar documentales multiplicará su tamaño por dos, con dos responsables de revisar las solicitudes de financiación. Hjalmar Palmgren, responsable de la unidad de financiación a la producción, ha afirmado: “Estoy encantado de haber conseguido contratar a dos nuevos asesores con un probado conocimiento del cine documental sueco y su lugar en el mercado internacional. Klara y Antonio se complementarán muy bien y conseguirán potenciar la diversidad de este género”. 

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Nacido en 1966, el productor Antonio Russo Merenda estudió derecho, cine y literatura en la Universidad de Roma entre 1985 y 1991. Es el co-fundador de Hysteria Film, que ha dirigido durante quince años. En 2012, fundó Ginestra Film en Estocolmo y ha trabando con socios de Finlandia, Dinamarca, Noruega, Alemania, Francia y Polonia. Entre sus películas se encuentran las premiadas The Vodka Factory, Finnish Blood, Swedish Heart [+lee también:
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entrevista: Mika Ronkainen
ficha de la película] y Colombianos. 

“En los últimos años, el cine documental sueco ha gozado de una gran visibilidad en el mercado internacional”, ha afirmado, “gracias a éxitos como The Black Power Mixtape 1967-1975 [+lee también:
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ficha de la película] o Concerning Violence [+lee también:
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ficha de la película], de Göran Hugo Olsson, presentados a concurso en Sundance y Berlín, pero sobre todo por Searching For Sugar Man [+lee también:
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ficha de la película], de Malik Bendjelloul, ganador del Oscar al mejor documental en 2013”.

Cineuropa: ¿Cuáles son los objetivos del área de financiación a la producción de documentales del SFI?
Antonio Russo Merenda: Esta área, desde el 1 de enero de 2015, ha multiplicado su tamaño por dos, con dos commissioners con funciones de revisión de las solicitudes de financiación: Cecilia Lidin y yo. Es un paso importante no sólo porque aumenta nuestra posibilidades de garantizar una alta calidad, sino que además significa un notable y comprensible aumento en el estatus del cine documental, que ahora está al mismo nivel de la ficción en cuando al número de puertas en las que se puede llamar. Ayudamos una gran variedad de cine documental, sin importar la duración o el formato. Podemos participar en la financiación de coproducciones internacionales a través de un socio sueco, siempre y cuando la película tenga distribución en Suecia. 

¿Cuáles son las tareas del commissioner?
Uno de mis objetivos como commissioner es concentrar mis esfuerzos en mantener y reforzar lo que creo que es la gran virtud del cine documental sueco, algo que se ha convertido en su marca en todo el mundo: su gran variedad de voces. Quiero seguir favoreciendo la producción de documentales de todo tipo, desde películas pequeñas y personales a proyectos más ambiciosos. Si eso ayuda a evitar la homogeneización, puede dar una bocanada de oxígeno a directores con objetivos muy distintos, ya que les da las mismas oportunidades de dar continuidad a su trabajo. 

¿Con qué presupuesto cuentas y cuántas solicitudes recibes?
Mi compañera y yo tenemos un presupuesto de aproximadamente 15 millones de coronas suecas cada año. En total, recibimos unas 400-450 solicitudes al año. Es una competición muy dura, ya que podemos financiar menos del 10% de los proyectos recibidos.

¿Qué criterio de selección usáis?
La evaluación que realizamos se basa principalmente en el universo artístico que se esconde tras la película, así como en la urgencia y la originalidad de la historia.

¿Hay acuerdos de cooperación con otros países escandinavos?
Desde hace muchos años, existe una sólida colaboración con el resto de institutos de cine nórdicos. El resultado es que cada año financiamos entre tres y cinco coproducciones nórdicas de gran calidad.

(Traducción del inglés)