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CANNES 2023 Quincena de los Cineastas

Cédric Kahn • Director de El caso Goldman

"Necesitaba colocar al espectador en la posición de un miembro del jurado"

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- CANNES 2023: El director francés habla sobre su fascinante drama judicial centrado en la figura de Pierre Goldman

Cédric Kahn  • Director de El caso Goldman

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, ha inaugurado la 55ª Quincena de los Cineastas (en el marco de la 76ª edición del Festival de Cannes). El director regresa, por tanto, a esta sección paralela en la que ya presentó su segundo largometraje, Trop de bonheur, en 1994.

Cineuropa: ¿Qué es lo que te hizo interesarte por Pierre Goldman, una personalidad llena de contradicciones, hasta el punto de decidir convertirlo en el personaje principal de tu nueva película?
Cédric Kahn:
Tiene un lado rockstar, casi punk. Es muy transgresor, provocador, divertido y seductor, y es evidente que utiliza todas estas armas para conseguir la aprobación de los demás. Es todo un showman, y eso es lo que origina el antagonismo con su abogado Georges Kiejman. Lo descubrí al leer Souvenirs obscurs d’un Juif polonais né en France, el libro que escribió para demostrar su inocencia mientras estaba en la cárcel, entre sus dos juicios. Estaba furioso por haber sido condenado sin pruebas. Como estaba convencido de que él mismo era su mejor abogado y la dialéctica era su fuerte, esgrimía argumentos que creía infalibles y se hacía cargo de su propia defensa. Pero en cuanto leí su libro, me di cuenta de que había muchas cosas que no acababan de quedar claras, y que esta defensa fue algo muy brillante y loco al mismo tiempo.

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¿Hasta qué punto te ceñiste a la realidad del juicio?
Tanto Nathalie Hertzberg, que escribió el guion conmigo, como yo fuimos bastante metódicos. Lo primero que hicimos fue reconstruir la estructura del juicio basándonos en artículos de prensa, cotejándolos entre sí para que fueran lo más precisos posible. Después, reconstruimos el drama del juicio colocando los testimonios en el orden que nos pareció más pertinente. Cabe mencionar que no nos privamos de nada e insertamos todos los elementos exteriores al juicio que nos parecieron interesantes, siempre tratando de ser lo más exhaustivos posible. Sin embargo, también necesitábamos que los espectadores percibieran el juicio como una investigación. Como se trata de una experiencia de inmersión, el espectador tenía que ponerse en la piel de un miembro del jurado, por lo que debía tener la máxima cantidad de información posible para poder formarse su propia convicción. Es como un debate interno sobre la verdad, en el que la convicción y el punto de vista cambian con cada nueva palabra.

Este juicio constituye también el reflejo de una época caracterizada por las utopías revolucionarias, el racismo de la policía, etc., y todo ello envuelto en un clima muy tenso de confrontación ideológica.
Sobresale el antagonismo entre Kiejman y Goldman, pero también se tratan otros temas como esa mitología característica de los años 70 y el espíritu revolucionario ligado a ella, aunque ya es demasiado tarde para eso en la película, pues el Che Guevara ya ha muerto y todos estos movimientos revolucionarios alcanzaron su verdadero apogeo a finales de los años 60. Pero es una época en la que sigue existiendo una utopía de izquierdas muy poderosa, y así es como la mitología juega sus cartas, así es como Goldman consigue el apoyo de todos los intelectuales de izquierdas. Y más allá del propio caso, en el juicio se traza una sociología que posee muchos rasgos comunes con la Francia de hoy: desde una izquierda radicalizada y una derecha situada muy a la derecha hasta la provincia contra las élites y el pueblo contra la intelectualidad.

¿Desde qué ángulo querías abordar la cuestión de la identidad judía?
Goldman y Kiejman son, a su manera, niños del Holocausto. Kiejman encarna la figura del judío resistente que ha transformado el sufrimiento en fuerza y ambición. Goldman, por su parte, es el judío maldito que siempre está envuelto en problemas y que ha acabado atrayendo un destino trágico. Se ha encargado de idealizar y convertir en heroica la historia de sus padres. En el fondo, le gustaría ser como ellos, pero no lo consigue. De hecho, el momento en el que lo dice resulta hermoso y conmovedor. Hay escenas en las que es como un niño pequeño y se puede apreciar cómo no cesa en su búsqueda de algún sentido a su vida.

¿Qué representa para ti esta película en tu extensa carrera?
Una de los aspectos más interesantes de acumular tanta experiencia es la creciente libertad para probar cosas nuevas que se adquiere. Aunque supone una verdadera lucha, intento ser más y más radical con cada película, llevar una idea todo lo lejos que pueda. Se trata de una estrategia de todo o nada, por lo que implica asumir ciertos riesgos. Si te obsesionas con tener éxito en todo, acabas fracasando una y otra vez. Intento tener siempre presente la esencia que me hace amar el cine e incluir caras no tan conocidas como la de Arthur Harari en el papel de Kiejman, y esa es una de las cosas que de verdad me gustan, por ejemplo. Lo que más me atrae de este tipo de personas es que aportan mucha credibilidad.

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(Traducción del francés)

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