CANNES 2023 Proyecciones de medianoche
Elias Belkeddar • Director de Omar La Fraise
"La idea era llevar a Kitano al universo del neorrealismo italiano"
por Marta Bałaga
- CANNES 2023: El director franco-argelino demuestra su amor por los psicópatas melancólicos, interpretados aquí por Reda Kateb y Benoît Magimel
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entrevista: Elias Belkeddar
ficha de la película], una de las proyecciones de medianoche del Festival de Cannes, Omar la Fresa (Reda Kateb) se encuentra en un aprieto: tras ser condenado a 20 años de prisión por las autoridades francesas, tiene que quedarse en Argel y pasar desapercibido con su mejor amigo, Roger (Benoît Magimel). Dejando atrás su vida de delincuente, o eso espera, Omar comienza a trabajar en una pastelería. Hemos hablado con el director de la película, Elias Belkeddar.
Cineuropa: Hay mucho cariño en la forma en que muestras a estos dos hombres. Es difícil concentrarse en la historia de amor incipiente de Omar, porque ellos son el alma de la película.
Elias Belkeddar: Lo que mencionas es el verdadero tema de la historia, ese amor entre ambos, porque para mí, la amistad es igual que el amor. La mejor manera de hablar de estas cosas es a través de personajes que parecen tener miedo a los sentimientos tiernos, a la vulnerabilidad. Esto me permitió deconstruir a esta figura del mafioso y mostrar lo que hay “detrás” de su vida. Su nombre, Omar la Fresa, es como un nombre artístico. Le estamos quitando la máscara, esa máscara de leyenda. Es una historia de hermanos, literalmente. De hecho, el mío es nuestro productor. Y mi padre fue mi principal fuente de inspiración.
¿Cómo querías retratar Argel en la película? Tus protagonistas están rodeados de gente local, y los llevas a todo tipo de sitios. Se trata de un lugar lleno de violencia, pero también es una comunidad auténtica.
El punto de partida fue mi deseo de mostrar la Argelia que conozco. El país de mi padre, el lugar de mi infancia. Buscaba una buena excusa para rodar una película allí. Todo el tema de los mafiosos surgió mucho después.
Se trata de mi percepción personal de este país: una visión romántica del lugar. Siento cariño por esta gente, por sus enormes personalidades. Además, tanto para mi generación como para la generación de inmigrantes en general, era frustrante que no existiera una representación de esta cultura en ningún sitio. Solo estábamos presentes en las noticias, y yo quería demostrar que existe otro mundo.
Teniendo en cuenta la historia entre Francia y Argelia, el hecho de que encuentre refugio allí es casi una declaración de intenciones por tu parte.
¡Absolutamente! Omar es un producto de su país, que es Francia. No es consciente de la belleza de este otro lugar. Aunque, en realidad, no es consciente de nada: no es consciente de su sensibilidad, ni de que una nueva vida es posible. En la película lo vemos descubriendo sus raíces, su identidad y sus emociones.
Tarantino también está en Cannes este año para dar una clase maestra. Me acordé de él cuando veía la primera escena de tu película, con los dos mafiosos caminando y hablando de cosas sin sentido antes de ponerse manos a la obra.
Es una influencia clara, por supuesto. Tarantino es el maestro, pero el primero en quien pensé fue en Takeshi Kitano. En su trabajo, también hay muchas de esas escenas “dialogadas”, y Kitano adora a sus gángsters deprimidos. Creo que es el único que ha mostrado eso: la figura del psicópata melancólico. Es algo que siempre me ha conmovido. Creo que Tarantino y Scorsese prefieren a un gángster romántico. Yo los disfruto, pero no me conmueven. No creo en ellos. En este caso, la idea era llevar a Kitano al universo del neorrealismo italiano. Algo como Feos, sucios y malos, de Ettore Scola.
Es el tipo de papeles que los actores adoran. ¿Tenían ganas de interpretarlos?
Por eso fueron tan generosos conmigo, y por eso hicieron la película: nunca habían hecho nada parecido. Hay un cierto placer en el hecho de enfrentarse a un desafío como este, y también es un placer verles actuar. En el cine francés, o incluso europeo, este tipo de papeles ya no son tan comunes. La última vez que funcionó, antes de convertirse en una caricatura, fue probablemente en Snatch, de Guy Ritchie. También ayuda que ambos sean tranquilos, amables, supertiernos y curiosos. No se parecen en nada a esa visión que tenemos de algunos actores famosos, que pueden ser realmente desagradables y problemáticos.
Tienes escenas que resultan entretenidas sin apenas esfuerzo, como cuando se ponen a bailar sin razón.
Quería hacer el tipo de película que me gustaría ver. Me preguntaba qué tipo de escenas querría ver en un tráiler y quería encontrar esas emociones de cuando era niño y estaba descubriendo el cine. ¡Me fascinaba enormemente! Si solo haces una película en tu vida, si solo tienes una oportunidad, ve a por ello. Es importante recuperar esas emociones.
(Traducción del inglés)
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