25/06/2024 - El director del festival de la isla canaria de La Palma habla sobre las peculiaridades del certamen, sus iniciativas y su conexión con el territorio en el que tiene lugar

La 19.ª edición del Festivalito – Festival de las Estrellas de La Palma está teniendo lugar del 21 al 29 de junio, entre proyecciones, conciertos y encuentros (este año, con actrices Lola Dueñas o Malena Alterio o el actor y cantante Albert Pla). Su director José Víctor Fuentes habla sobre las peculiaridades del certamen, sus iniciativas, y sobre todo, la conexión que tiene con la isla canaria en la que tiene lugar.

Cineuropa: ¿Cómo ha evolucionado el Festivalito desde su primera edición y cuáles han sido los principales desafíos que han enfrentado a lo largo de los años?
José Víctor Fuentes: El Festivalito empezó en el año 2002 y siempre tuvimos claro que no queríamos ser un festival de cine, que queríamos ser un festival donde hacíamos cine. No utilizamos el cine como un fin, sino como un medio, y desde el año 2015 entendemos que el cine tiene que ser una herramienta para descubrirnos. Es un medio que hace que todas esas personas que están tratando de hacer una película tengan que convivir entre ellos para ayudarse mutuamente. Y al ayudarse se conocen. Y también provoca una convivencia entre todos los cineastas, intérpretes y técnicos que vienen aquí, y la gente que vive en la isla de La Palma, que acaba participando en los rodajes, ya sea saliendo como actores, contándoles historias, dejándoles su casa, facilitando localizaciones.

¿Qué iniciativas tiene el Festivalito para apoyar y promover el talento local en las Islas Canarias, y cómo ha impactado esto en sus carreras?
El Festivalito tiene un impacto enorme en el territorio donde se realiza, que en este caso es la isla de La Palma, porque nació pensado para desarrollarse única y exclusivamente en toda ella. Las actividades de rodaje tienen lugar prácticamente en todos los municipios de la isla. Normalmente el público está acostumbrado a ver en pantalla historias en territorios ajenos a donde vive, pero llevamos 19 años contando historias en el nuestro y tenemos la suerte de contar ya con más de un millar de cortometrajes. Hay historias que tienen que ver con este territorio y otras historias que son universales y que no tienen absolutamente nada que ver con él. Pero el hecho de que se muestren una y otra vez diferentes localizaciones de La Palma hace que tengamos un impacto cultural bastante interesante, porque nos hace resaltar sus diferentes valores.

Por otro lado, el Festivalito tiene un impacto económico muy importante en todo el territorio porque tratamos de ser desde hace muchos años un festival sostenible y kilómetro cero. Eso quiere decir que, para empezar, la mayoría de las empresas que nos ofrecen servicios son locales. De las empresas técnicas audiovisuales a las empresas de alquiler de coche, empresas de servicios de restauración, de alojamiento, de viajes. Prácticamente el 85% que gasta el Festivalito se queda en la isla de La Palma. Hemos hecho un estudio en el territorio: con un presupuesto que tenemos de 240.000 €, el impacto en él es de 1.000.000 €. Por otro lado, el impacto publicitario, equivalente a todas las apariciones en los medios, tanto digitales como tradicionales, llega casi a los 400.000 €.

¿Qué estrategias utilizáis para atraer tanto a los residentes como a los visitantes de La Palma a participar en el festival?
Ser muy activos en las redes sociales y utilizar mucho el lenguaje moderno para atraer a visitantes ávidos de experiencias culturales. Todos los actos del Festivalito son gratuitos y tenemos actividades para todos los públicos, no solo para el público del cine de autor o del cine más experimental, sino que, por ejemplo, ponemos películas de diferentes estilos, ya sean comedia, thrillers de acción o películas de terror.

Hemos tenido especial atención a que todos los cineastas canarios de cada año vengan a participar directamente en las proyecciones y, de paso, les retamos a que participen en el reto de La Palma rueda, que es un concurso de rodajes exprés o de creación cinematográfica, en el que los participantes se enfrentan al reto de idear una historia, buscar localizaciones y formar un equipo técnico y artístico para rodar, editar y estrenar un cortometraje durante la semana que dura el encuentro, ajustándose a un lema que se lee en la ceremonia inaugural [consulta toda la información sobre las bases, la inscripción y los participantes aquí].