Zhengfan Yang • Director de Stranger
"No necesito pertenecer a un cierto lugar o a un cierto país"
por Susanne Gottlieb
- El director nacido en China explora la habitación de un hotel como no espacio y epicentro de la falta de sensación de pertenencia

El director Zhengfan Yang, nacido en China y afincado en Estados Unidos, ha tratado siempre en sus películas la sensación de ser un forastero en espacios construidos socialmente. Stranger [+lee también:
crítica
entrevista: Zhengfan Yang
ficha de la película], su nuevo largometraje, que está inspirado en su propia experiencia personal y le ha valido del Gran Premio de la sección Proxima del 58.º Festival de Karlovy Vary, revela la profunda sensación de alienación que siente el individuo en el espacio impersonal de una habitación de hotel.
Cineuropa: Eres cineasta y viajas mucho, y probablemente también estés alojándote en un hotel durante el festival. ¿Fue de ahí de donde surgió la idea de ambientar una película en habitaciones de hotel?
Zhengfan Yang: La idea está estrechamente relacionada con mi experiencia en diferentes habitaciones de hotel por todo el mundo. Estos espacios son sinónimo de alienación y aislamiento en la vida moderna. La idea surgió en 2016, un año después de mudarme de China a Estados Unidos. Vivir entre estos países ha intensificado mi sensación de ser un forastero. Las razones por las que no me siento uno más en Estados Unidos son el idioma y la cultura. Pero los rápidos cambios en China hacen que el país me resulte irreconocible cada vez que lo visito, por lo que también me siento un forastero en mi país de origen. Las habitaciones de hotel como espacio cinematográfico ejemplifican mis sentimientos personales, así como la experiencia universal de la vida moderna.
La idea del hogar se manifiesta en repetidas ocasiones a lo largo de la película, pero nunca hay una respuesta clara sobre lo que realmente constituye un hogar.
Llevo mucho tiempo haciéndome esa misma pregunta. Me trasladé a Estados Unidos cuando tenía 30 años, y llevo allí ya 10 años. ¿Qué pasaría si pasara, digamos, 20 o 30 años más allí? ¿Cuál sería el lugar al que llamaría hogar? No tengo una respuesta clara a esa pregunta, porque no necesito pertenecer a un lugar o país determinado. Mi verdadera intención consiste en observar siempre las cosas desde la perspectiva de un forastero.
Las habitaciones de hotel son una especie de no lugares, por y en sí mismos, puesto que existen de forma transitoria. ¿Sentiste en algún momento la necesidad de mantener estos espacios como neutrales en comparación con los personajes que los habitan?
Creo que sí. Los “no lugares” constituyeron un concepto de especial importancia durante el desarrollo de la película. Las habitaciones de hotel están cortadas por el mismo patrón en todo el mundo. Resulta casi imposible saber en qué ciudad o país está situada una habitación de hotel si no hay nadie dentro. La diferencia reside fuera de la pantalla, fuera de la habitación, fuera del marco. Y ese “exterior” no es otro que la China de hoy en día. Dentro de la habitación están los chinos de hoy. Así que, por supuesto, la película podría estar ambientada en cualquier lugar, pero yo quería hacer una película sobre chinos contemporáneos en un espacio moderno.
¿Qué es lo que más te atrae de ser un forastero?
Mi primer largometraje lo rodé en mi ciudad natal, en China. Luego viví cuatro años en Hong Kong, donde rodé mi segunda película. Después, me trasladé a Estados Unidos, donde realicé mi tercera película, un documental rodado en Chicago. Siempre es una experiencia personal lo que transmito a través de mis películas, y Stranger se desarrolló a lo largo de muchos años. Como soy capaz de ver China desde la perspectiva de un forastero, no tuve problemas a la hora de construir la película mediante la combinación de diferentes historias independientes en lugar de una única narración, y lo hice con el fin de ofrecer un retrato panorámico de la sociedad.
A la película también se suma uno de tus cortometrajes, Down There.
Down There comparte el mismo concepto visual que la última escena de Stranger. Era una historia diferente, pero el guion original de esa escena habría sido demasiado dramático si la hubiera utilizado como final para Stranger, así que decidí hacer en su lugar un cortometraje independiente y mantener el mismo final para Stranger.
(Traducción del inglés)
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