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LOCARNO 2024 Cineasti del Presente

Maxime Jean-Baptiste • Director de Listen to the Voices

"La ficción nos ha permitido distanciarnos de la tragedia, para que la realidad no nos hunda"

por 

- El joven director originario de la Guyana francesa habla sobre la cercanía con sus personajes, sobre cómo representar la violencia y sobre cómo hablar sobre los traumas propios

Maxime Jean-Baptiste • Director de Listen to the Voices

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, el primer largometraje del director originario de la Guayana francesa Maxime Jean-Baptiste, que ha sido presentado en la sección Cineasti del Presente del Festival de Locarno, el joven cineasta —que actualmente vive entre Bruselas y París— narra el dolor de quienes han sido testigos de la injustificada muerte de su primo Lucas.

Cineuropa: ¿Cómo nació la idea de la película? ¿Cómo describirías la experiencia de trabajar con los verdaderos familiares de Lucas, que a su vez son los protagonistas de la película?
Maxime Jean-Baptiste:
Sí, los personajes son los verdaderos protagonistas de la historia, quienes vivieron en sus carnes la tragedia: Nicole, Melrick y Yannick. Sin embargo, en la película también hay algo de ficción, ya que tratamos de encontrar una forma de interpretar su propia historia. Este lado ficticio nos ayudó mucho. De hecho, Nicole es mi tía, Melrick mi primo pequeño, y Yannick se ha convertido en un amigo íntimo, así que tenemos una relación muy cercana. La ficción nos permitió tomar distancia respecto a la tragedia, para que la realidad no nos abrumara. Fue un proceso de trabajo muy largo. Empecé a reflexionar sobre la película hace cinco o seis años, y lo cierto es que mi idea cambió de forma en numerosas ocasiones. El proceso fue extenso, pero necesario para que los tres personajes pudieran vivir su dolor. Hablé mucho con ellos y, de una manera progresiva, durante la fase de escritura que llevé a cabo junto con mi hermana Audrey (Jean-Baptiste), surgió la idea de convertir el largometraje en una narración de ficción. En realidad, se trata de una historia personal con la que todas aquellas personas que hayan perdido seres queridos en circunstancias trágicas se podrán ver identificadas.

¿Dirías que fue esa la razón por la que decidiste optar por la ficción en lugar de realizar un documental?
La cuestión de la distancia ocupa sin duda un lugar central, pero también nos dimos cuenta de que, en términos de resultados, un enfoque documental más clásico y basado en la premisa de ceñirse única y exclusivamente a lo real no era suficiente. Había momentos en los que los personajes necesitaban salir de la historia propiamente dicha, hablar de otras cosas. Por lo tanto, la ficción nos brindó, tanto a los personajes como a mí mismo, más libertad de interpretación. En ocasiones, el documental clásico no constituye la mejor opción para ciertos personajes. Nicole, por ejemplo, no se sentía cómoda con la idea de sentarse y hablar directamente conmigo como director. Se sentía más segura con el registro mucho más encuadrado y dirigido de la ficción.

En este sentido, en la película se nota que la música y el arte (en especial el arte urbano) representan una verdadera vía de escape para los personajes. ¿Crees en el poder terapéutico del arte, del que forma parte el cine?
Supongo que hay en mí un deseo de que la película contribuya a sanar las heridas de todos, aunque soy plenamente consciente de que no es más que una fase más de un largo proceso para ellos. No tengo la intención de realizar un trabajo terapéutico, ya que tampoco tengo las herramientas para ello. Es cierto que algunas de las herramientas del cine les han ayudado en un momento tan crucial de sus vidas como este, especialmente a Yannick, el personaje más traumatizado. Sin embargo, seguramente también necesitaría un trabajo a largo plazo, una terapia de conversación, puesto que está realmente atrapado en sus traumas. No cabe duda de que la película ha permitido a los protagonistas reabrir sus heridas, pero todavía tienen mucho trabajo por delante si quieren sanarlas.

La violencia se percibe en todo momento en el ambiente, pero nunca llegas a mostrarla de manera explícita. ¿Por qué esta elección?
Después de meditarlo durante mucho tiempo, decidimos que esa sería la forma en la que abordaríamos este aspecto. Audrey y yo, junto con el productor francés Olivier Marboeuf y las productoras belgas Rosa Spaliviero y Ellen Meiresonne, pasamos por varias fases de redacción del guion. Invertimos mucho tiempo en pensar en la mejor forma de retratar un acontecimiento tan violento, pero lo más importante para nosotros era dejar un espacio auténtico para la vida de los personajes, comprender cómo hacen para convivir con los distintos traumas que les atormentan. Dicho esto, era necesario volver sobre lo que ocurrió, mencionarlo. Se trata de una violencia sistémica que afecta a Guayana francesa y a sus adolescentes, quienes a menudo no tienen muchas perspectivas y acaban por autodestruirse, por matarse entre ellos debido a cuestiones de honor. Podríamos haber reconstruido los hechos dando detalles "clínicos", pero creo que no habría sido la forma más acertada de hacerlo, especialmente en relación con los personajes de la película que vivieron la tragedia. Por ello, decidimos que lo mejor sería representar la violencia de la manera más sutil posible, pero sin ocultarla. Queríamos conservar la sutileza y reflexionar sobre cómo se vive con un trauma así, que también constituye una forma de violencia.

(Traducción del francés)

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