LOCARNO 2024 Cineasti del Presente
Jessica Sarah Rinland • Directora de Monólogo colectivo
"Un monólogo colectivo puede existir entre el ser humano y los animales y también entre los trabajadores y las instituciones"
por Muriel Del Don
- La directora argentino-británica habla sobre su interés por la ecología y la conservación museística, su relación con sus protagonistas y sus referencias artísticas

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entrevista: Jessica Sarah Rinland
ficha de la película], de la directora argentino-británica Jessica Sarah Rinland, presentado en la competición Cineasti del presente del Festival de Locarno, muestra lo crucial que es escuchar y respetar a los animales para entrar en contacto con ellos. A través de sus protagonistas, cuidadores y cuidadoras del Ecoparque de Buenos Aires, la directora establece un diálogo profundo con los animales que lo habitan.
Cineuropa: ¿De dónde nació la idea de hacer una película sobre la profunda e intensa relación entre cuidadores y cuidadoras y animales?
Jessica Sarah Rinland: Mi película anterior ya tiene que ver un poco con la conservación museística, pero también con la ecología. Esta fascinación por la conservación y la ecología hizo que me interesara en el zoológico de Buenos Aires, que está basado un poco en zoológicos de Berlín donde los recintos son réplicas de la arquitectura de los países de donde vienen los animales. Debido a diferentes problemas, el zoo se quedó cerrado desde 2016 hasta 2019 y abrió de nuevo, en manos de la ciudad cuando empezaron a llamarlo ecoparque. Al ir todos los días al zoológico para hacer investigaciones, empecé a conocer a gente y sobre todo a la cuidadora Maca Santa María Lloydi que es una de las “actrices” participantes. Maca y yo nos hicimos muy amigas. Es difícil no enamorarse de ella, de su conexión con los animales y de su dedicación a la lucha no sólo por los animales sino también por los trabajadores. Me alquilé un apartamiento que tenía un balcón con vista al zoológico donde iba todos los días. A pesar de la disponibilidad de los trabajadores y de las cuidadoras, debo admitir que fue muy difícil conseguir permisos oficiales para tener acceso al parque y poder rodar la película.
¿Como conseguiste la confianza de sus protagonistas para poder filmarlos y filmarlas tan de cerca, de manera tan íntima y profunda?
Hacer la película me tomó cinco años, cinco años interesándome en personas que se convirtieron en amigos que confiaban en mí. La cercanía con los animales nació a través de Maca y las otras cuidadoras y cuidadores del parque. La relación entre cuidadores y animales cambió muchísimo a lo largo de los años y de las épocas. La verdad es que no sé, y nunca sabré, si los animales reconocían que les estaba filmando, pero creo que sí, por ejemplo los elefantes. Pude acercarme a ellos siempre a través de sus cuidadoras.
En tu película, toda relación humano-animal se basa sobre la ternura, el raspeo y el refuerzo positivo. ¿Cuáles son tus referencias teóricas?
El título de la película está sacado de una cita de Jean Piaget. Él decía que hay un estado, entre los dos y los cuatro años, durante el cual los niños y las niñas piensan que la naturaleza está creada para ellos y ellas y que la pueden manipular. Describió este proceso así: hay algunos chicos y chicas en un círculo que están hablando y nadie está escuchando, como si dialogaran a través de un monólogo colectivo. Un monólogo que puede existir entre las personas que trabajan en el parque y las instituciones, pero también entre el ser humano y los animales o los animales entre ellos. Hay muchos distintos niveles de lo que podría significar “monólogo colectivo” en la película.
¿Cuáles son tus influencias artísticas más en general y para esta película más en particular?
Entré en la escuela de arte en Londres interesada en fotografía y pintura. Durante el primer año de la universidad, la primera semana de cursos, me mandaron al Tate Modern a escribir una crítica sobre una obra de arte y allí conocí el trabajo de Jonas Mekas. Nunca había visto películas como las suyas y me encantaron. Por casualidad, supe que estaba interesado en proyectar algunas películas de jóvenes directores y directoras en un cine de Londres y, por suerte, los programadores me invitaron. Chick Strand, Narcis Hirsch y Mary Field son grandes influencias, como también un fotógrafo, de los años 1880, que se llama George Shiras. Fue conocido como el primer fotógrafo que hizo fotos de animales de noche. Pasó de ser cazador a fotógrafo. Hoy en día, esta cámara de noche de infrarrojos, que está utilizada por los biólogos, se llama cámara trampa y es una evolución de la cámara que inventó a Shiras. Ahora estoy trabajando en una video-instalación centrada en su trabajo que se inaugurará en Tabakalera, San Sebastián, en septiembre de 2024.
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