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Andy Harries • Producer

"La Reina, un emblema universal"

por 

- Andy Harries ha trabajado como ejecutivo de televisión para Granada TV. Fue suya la idea de llamar a Helen Mirren para La Reina mientras trabajaba con ella en Prime Suspect 6

Una de sus socias de producción en La Reina [+lee también:
crítica
tráiler
entrevista: Andy Harries
entrevista: Stephen Frears
ficha de la película
]
fue Christine Lagan, con quien logró el éxito en 2003 del drama televisivo The Deal para Channel 4, donde se investigaba el pacto de liderazgo de Tony Blair y su ministro de Economía Gordon Brown. Varios miembros creativos y artísticos de La Reina ya trabajaron juntos en The Deal: el actor Michael Sheen, el director Stephen Frears y el guionista Peter Morgan.

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Cineuropa: La Reina es un triunfo en las pantallas británicas (más de 6,4 millones de euros). ¿Dio las gracias a Tony Blair por calcular su “desintegración” política justo en el momento del estreno de la película…?
Andy Harries: Lo desafortunado, de cierta manera, es que la película recuerda a la gente de Reino Unido lo que prometió cuando llegó al poder. De cierto modo, sus acciones en la semana que siguieron a la muerte de la Princesa Diana (como se muestra en la película) refleja su carrera como Primer Ministro durante los últimos 10 años. Hoy, mucha gente está muy desilusionada a causa de nuestra participación con Estados Unidos en la guerra de Irak. La gente se ha sentido traicionada. El éxito de la película se debe sin duda, en parte, al sentido de capturar un momento.

¿Cómo vino a su cabeza la idea de la película?
Trabajando como ejecutivo de televisión para Granada TV, traje de vuelta el drama Prime Suspect y tuve una larga relación de trabajo con Helen Mirren. Cuando estaba leyendo el guión con ella, entraron otros actores y le hicieron una reverencia porque es una gran figura y, realmente, gusta a la gente. Así que pensé: “¡Cielos! Es como la Reina, la gente la adora, y…también se le parece!” Así que, tras The Deal, la idea de realizar una película sobre la Reina me parecía una estupenda y atrevida idea. Antes de Diana, la película no habría sido aceptada por el público, sin embargo, durante los últimos 10 años, el desenmascaramiento de la Familia Real ha cambiado por completo la manera de ser vista por la gente. Eso fue el catalizador y lo que nos permitió realizar la película.

¿Cuánto tiempo han tardado las investigaciones del proyecto?
Estaban involucradas más o menos 50 ó 60 personas, entre ellas, varios observadores reales, periodistas, lobbys políticos y algunos peces gordos del Partido Laborista que confiaron en nosotros con nuestro trabajo en The Deal. Así que tuvimos muy buenos contactos, pero cada reunión se apoyaba en notas muy detalladas y todo pasaba por abogados. No metimos nada en el guión a no ser que tuviéramos tres fuentes que respaldaran los datos.

¿Cómo reunió la financiación junto con Pathé?
Desde el principio, siempre pensé que era un papel fantástico y la Reina, un emblema universal. Contacté con Pathé, quien dijo que estaba encantado de asociarse con Granada. Pathé se hizo cargo del exterior en América y la vendió rápidamente a muchos territorios, por lo que, desde el principio, estábamos bastante seguros de que sobre el 75% del presupuesto vendría del exterior. Por ese tiempo, Daniel Battsek, un viejo amigo mío, se convirtió en Director de Miramax. Pensó que el guión era perfecto. Así que la combinación de las preventas más la venta en Estados Unidos aseguraron básicamente los beneficios a la película casi antes de que empezáramos a rodar. El presupuesto final fue de unos 16 millones de dólares (12.776.000 euros).

Tras Blair y Brown y Blair y La Reina, ¡¿vendrá Blair y Bush?!
En realidad, nos encontramos en una fase muy prematura para mirar hacia una nueva historia donde se esté envuelto Blair, Bush y ¡por qué no Clinton! Lo que realmente queremos explorar es la alianza angloamericana. La gente debe preguntarse qué narices está pasando con nuestro país, somos parte de Europa o no…

¿Cuál es el legado de Blair en la película en lo que se refiere a lo que hizo su gobierno por la industria cinematográfica británica?
Existen nuevas leyes de deducciones fiscales que están animando. Para la industria cinematográfica británica, siempre es mejor tratar temas autóctonos. El error es pensar en el mercado. Siempre pisamos mejor cuando hacemos algo sobre cosas que conocemos y no estimaciones dobles sobre la cultura estadounidense. Espero que los cineastas británicos continúen explorando Gran Bretaña en sus películas.

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