email print share on Facebook share on Twitter share on LinkedIn share on reddit pin on Pinterest

CANNES 2009 Una Cierta Mirada / Rumanía

Mungiu y compañía divierten en Tales from the Golden Age

por 

Se dice que, tras la proyección de 4 meses, 3 semanas y 2 días [+lee también:
crítica
tráiler
entrevista: Cristian Mungiu
entrevista: Oleg Mutu
ficha de la película
]
, un espectador se acercó al director Cristian Mungiu, que posteriormente se adjudicó la Palma de Oro con esa cinta, y le espetó: “¡Qué vergüenza! Cada vez hay más películas para los festivales y menos para el público. ¿No se podría hacer algo para cambiar la situación?”

Ésta es la génesis del proyecto Tales from the Golden Age [+lee también:
tráiler
ficha de la película
]
, película colectiva a episodios realizada por cinco cineastas (Cristian Mungiu, Ioana Uricaru, Hanno Höfer, Razvan Marculescu y Constantin Popescu), que ya desde el título revela su intención: evocar la vida de los rumanos durante el último período de la dictadura comunista, el peor, a través de las distintas “leyendas urbanas”.

(El artículo continúa más abajo - Inf. publicitaria)

La idea de Mungiu, que produjo la cinta junto a Oleg Mutu, era la misma que tenía en las colas que se hacían para entrar en los tiendas durante el comunismo: nunca se sabía que lo que se encontraría. Y así, cada proyección de la película tendrá capítulos diferentes, de manera que nadie verá el mismo filme.

Con su dirección vivaz, la evocación sarcástica, con la música, la falsa nostalgia de los años 80, el lenguaje, las imágenes y los estereotipos, Tales from the Golden Age deja su huella. Y ofrece la visión de un pueblo que intenta sobrevivir, obligado a buscar una lógica en las directivas del Partido.

Tres de los cinco episodios desvelan principalmente el aspecto cómico del régimen. La espera de una visita oficial de los dirigentes del Partido acaba en una vuelta sobre un carrusel que nadie consigue detener. Con motivo de la visita del presidente francés Giscard D’Estaing, se pide al fotógrafo oficial del periódico del partido que retoque la foto en primera página de modo que el dictador Ceausescu parezca de la misma altura que el altísimo colega. Una familia recibe un cerdo vivo como regalo y, cuando intenta matarlo con el gas de cocina, provoca una explosión en el apartamento.

Los otros dos son menos cómicos y del régimen denuncian no sólo la estupidez sino también los peligros. Quién se arriesga para ganar algo más o compra mercancías que han desparecido de los estantes, como una docena de huevos, puede terminar en la cárcel.

Si estas historias son verdaderas o fruto de la imaginación y el humor rumano no tiene importancia. Con la vitalidad propia de un cine que ha encontrado finalmente su camino después de años de silencio, este filme a la geometría variable recuerda la cinematografía italiana de los años 60 y 70: popular, directa y divertida.

(El artículo continúa más abajo - Inf. publicitaria)

(Traducción del italiano)

¿Te ha gustado este artículo? Suscríbete a nuestra newsletter y recibe más artículos como este directamente en tu email.

Privacy Policy