07/09/2009

Los principales proveedores de Internet del Reino Unido han emitido una protesta conjunta ante las recientes declaraciones del ministro británico Stephen Timm en las que proponía impedir el acceso a Internet a los usuarios que descarguen ilegalmente contenidos.

Charles Dunstone (talktalk), Ian Livingston (British Telecom), Tom Alexander (Orange UK), Jim Killock (Open Rights Group), Ed Mayo (Consumer Focus) y Deborah Prince (Which?’s) ilustraron sus discrepancias con el ministro en una carta abierta al periódico The Times.

Extractos:

“Estamos de acuerdo con que las industrias creativas juegan un papel importante en el Reino Unido y comprendemos el desafío que supone el intercambio ilegal de archivos. No justificamos o favorecemos tal conducta, pero nos preocupa que las recientes propuestas del gobierno para combatir el intercambio ilegal de archivos son erróneas y amenazan los derechos de los consumidores y el desarrollo de nuevos servicios”.

“Se supone que los consumidores son inocentes hasta que se pruebe lo contrario. Deberíamos evitar juicios sumarios donde las pruebas no son suficientemente fuertes y los usuarios bajo acusación no puedan defenderse de acusaciones falsas. Sin esta protección, pagarán los inocentes. Cualquier tipo de multa debe ser proporcional”.

“Impedir el acceso a Internet pondría serios límites a la libertad de expresión. Normalmente, la restricción de la libertad de expresión se impone por condenas bajo custodia, incitación al odio racial o calumnia. La propuesta de que los proveedores de Internet, y como consecuencia los usuario de banda ancha, deban pagar la mayor parte del coste de estas medidas es claramente injusto ya que la gran mayoría de usuario no intercambia archivos de modo ilegal”.

(Traducción del inglés)