06/10/2009

El amor desde una perspectiva diversa: primero viene Eva, después Adan. Primero la mujer con sus deseos, sus dudas, sus valerosas elecciones. Después el hombre. Lo propone Vittorio Moroni con su documental Eva e Adamo, cuyos protagonistas son tres mujeres “normales” enfrentadas a unos amores especiales.

Está la anciana Erika (nombre de arte que se considera una escritora de novela rosa) que – después de una vida aventurosa y dos hijas con un ex-marido japonés que no quieres saber nada de ella - ahora está casada con un senegalés de treinta años. Después está Deborah, estrella del porno de provincia que responde a las llamadas eróticas en una tv local y ha actuado en alguna película “donde también hay algo de trama”, pero que ahora desempeña su papel de madre. Y finalmente Veronica, que tras la muerte imprevista de su ex-novio se ha ido a Lourdes como enfermera y se ha enamorado de un hombre afectado por esclerosis múltiple: con él, a pesar del avance de la enfermedad, ha tendido dos hijos.

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Después de haber dirigido Tu devi essere il lupo y Le ferie di Licu Moroni vuelve a explorar los amores difíciles y para este film, producido por 50notturno, se ha empeñado en una auto distribución un poco especial. Todas las noches, en todos los pases del cine 4 Fontane de Roma, ofrece una manzana a los espectadores que entran en la sala y un fotograma del film a aquellos que salen. Hasta ahora, la estrategia de promoción "ad personam" ha dado sus frutos, y no solo manzanas: il 4 Fontane ha prolongado la exhibición de Eva e Adamo al menos hasta el 8 de octubre tras los resultados de la primera semana.

(Traducción del inglés)