15/06/2010

Una “manera italiana” para ayudar al cine. En esto consiste la propuesta formulada por Riccardo Tozzi, presidente de la sección de productores de Anica en la conferencia “Arte y productos del ingenio: Relación con la producción y el márketing”, parte del congreso Economía del cine Italiano, organizado por el Máster en Economía y Gestión de Medios de Comunicación, la Facultad de Economía y el Departamento de Cultura, Música y Espectáculo de la Facultad de Letras y Filosofía de la Universidad Tor Vergata de Roma y en colaboración con Anica y la Roma Lazio Film Commission.

Tras analizar los años de oro del cine italiano, Tozzi ha subrayado cómo “hoy día los canales de distribución tradicionales, la televisión en abierto y de pago, componen un mercado sin salida”. Pero, ¿cómo dar lugar a una tercera modalidad, a caballo entre la francesa, que goza de un apoyo público inteligente, y la estadounidense, que se apoya en un sistema muy competitivo? “Es necesario entrar en los impuestos, pero gestionados por nuestras asociaciones de sector, no el Estado. Si se aumentase el precio de la entrada, algo que no hace desde años, podríamos pensar en un impuesto destinado a la mejora de los cines urbanos y de un cierto tipo de producción”. Además, ha enumerado sus objetivos: “Trabajar en los fondos regionales y en la consolidación del crédito fiscal, así como en la defensa del Fondo Único para el Espectáculo, el incremento de los cines en las ciudades y el aprovechamiento de la red”.

Por último, ha emitido una valoración sobre el estado del cine italiano en estos momentos de crisis global: “Al final no se ha producido el annus horribilis que muchos vaticinaban. En 2010, la llegada del 3D se ha visto acompañada por el aumento de la cuota de mercado del cine italiano, que ha superado el 30% de la recaudación total”.

(Traducción del italiano)