17/12/2002

El pasado 12 de diciembre ARP (Sociedad de Autores, Directores y Productores) presentó una propuesta sobre financiación del cine francés en la que ofrece un detallado análisis de los desequilibrios del sistema actual y de sus posibilidades de reglamentación, adelantándose al informe Leclerc sobre el mismo tema, solicitado por el ministro de Cultura Jean-Jacques Aillagon, cuya entrega está prevista para enero.
Entre las soluciones que ARP propone, destaca el aumento en los costes de producción de largometrajes que ha inducido a los productores a ampliar el número de fuentes de financiación de una película, mientras en los mercados nacionales e internacionales se tiende a una estabilización de las posiciones dominantes, controlando de esta manera toda la red cinematográfica, desde la producción hasta la venta pasando por la distribución. Una tendencia a la fusión vertical que aumenta las diferencias con los independientes y una estandarización de la producción que termina por incidir en la calidad de las películas.
Otro aspecto importante que el informe destaca se refiere al modelo francés de financiación previa: gracias a las televisiones y a los mecanismos de financiación como el “Anticipo por Recaudación”, aunque se asegure una diversidad en la producción, ésta debe reorganizarse en función de los cambios económicos que se producen. ARP destaca varias soluciones posibles: restablecer una tasa de apoyo al cine mediante un aumento a las tasas sobre vídeos caseros e ingresos publicitarios; obligar a que se difundan avances de las películas de producciones independientes; aumentar las ayudas a los exhibidores en función de la duración de la programación en sala de las películas; aumentar el apoyo económico a los distribuidores independientes y conceder premios a la mejor distribución de películas europeas.
En el aspecto financiero ARP pide que aumenten las cantidades invertidas por las Sofica (sociedades para financiar a la industria del cine y de la televisión) y que se orienten más hacia las producciones independientes; la creación de un pacto entre el Estado y las Comunidades en apoyo al cine; la extensión de la cláusula de diversidad a las preadquisiciones de películas por parte de las televisiones públicas y un límite para los precios de compra de las televisiones de pago.

(Traducción del francés)