03/08/2011

Como en la edición anterior, el cine suizo contará con una digna representación en el 64° Festival del Cine de Locarno. El número de producciones helvéticas seleccionadas en las secciones competitivas y en todos los niveles del certamen ha incluso aumentado ligeramente con relación a 2010. Entre la veintena de obras presentadas este año en la sección internacional, tres lo harán blandiendo la bandera suiza.

Abrir Puertas y Ventanas, ópera prima de Milagros Mumenthaler, nacida en Argentina y egresada de la Universidad de Cine de Buenos Aires, narra la historia de tres jóvenes hermanas que deberán afrontar el deceso de la abuela que las crió. Mangrove [+lee también:
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ficha de la película], también candidata, es la segunda colaboración importante entre Julie Gilbert y Frédéric Choffat. Después de haber escrito juntos La vraie vie est ailleurs en 2006, ahora co-dirigen esta ficción que aborda el destino de una mujer tras su regreso al Pacifico sur. La tercera y última película helvética en competición internacional, Vol spécial, de Fernand Melgar, podría considerarse, de alguna manera, como la prolongación de La forteresse [+lee también:
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ficha de la película], por la cual obtuvo en 2008 el Leopardo de oro en la Sección Cineastas del presente. La película es una inmersión documental en la cárcel de Frambois, en Ginebra y muestra sin tapujos el tratamiento que reciben los sin papeles en Suiza.

Otro documental, The Substance, de un director asiduo del festival como Martin Witz, no debería pasar desapercibido en la Sección Cineastas del presente. La obra está dedicada a Albert Hofmann, químico suizo conocido sobre todo por haber inventado, a su pesar, el LSD.

La representación del cine suizo en Locarno se extenderá, no obstante, más allá de las películas en competición. En la pantalla gigante de la Piazza Grande, lugar mágico y central, también se proyectarán la coproducción entre Alemania y Suiza Hell, de Tim Fehlbaum , recientemente recompensada en el Festival de Múnich, y del cortometraje de animación Romance, del ineludible Georges Schwizgebel.

Cabe destacar también el importante homenaje dedicado a Daniel Schmid (fallecido hace cinco años en el momento de la apertura de la 59ª edición del festival) a través de la proyección de su película L’ombre des anges a la cual asistirán su amigo Renato Berta y la actriz Ingrid Caven. Asimismo, Donattelo Dubini, otra gran figura desaparecida, será recordado en Locarno con motivo de una sesión especial dedicada a su última película, Die Grosse Erbschaft, realizada junto a su hermano Fosco.

Locarno destacará igualmente la carrera de Claude Goretta al presentar las nuevas copias de La invitación, La provinciale y La encajera, restauradas por la Filmoteca suiza, así como con la programación de Bon vent Claude Goretta, documental que Lionel Baier consagró al cineasta suizo. Por último, el festival otorgará este año su Excellence Award Moët & Chandon a una de las actrices más emblemáticas de la obra de Goretta, la francesa Isabelle Huppert.