23/11/2011

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ficha de la película], el proyecto cinematográfico más exitoso de Escandinavia, ha ganado el Emmy internacional a la mejor miniserie de televisión durante la ceremonia celebrada en Nueva York el pasado lunes en la que la Academia de Artes y Ciencias de la Televisión nombró a los mejores programas de televisión producidos y emitidos en primera instancia fuera de Estados Unidos.

El director ejecutivo Mikael Wallén; los productores Søren Stærmose y Susann Billberg, de Yellow Bird Production; la directora de programación Annie Wegelius y el productor ejecutivo Gunnar Carlsson, de la cadena pública sueca SVT, se alzaron, así, con uno de los tres premios Emmy a los que optaban: Noomi Rapace, por su papel de Lisbeth Salander, y Michael Nyqvist, quien encarna a Mikael Blomqvist, no consiguieron llevarse el gato al agua en las categorías de mejor actriz y mejor actor.

“Los Emmy –los premios más importante del mundo en el ámbito de la televisión– demuestran que Suecia tiene el potencial de competir a nivel internacional. Este galardón impulsará la producción sueca y mejora nuestras perspectivas de futuro”, afirmaron Wallén y Wegelius. Yellow Bird produjo los tres largometrajes y los seis episodios de televisión de Millennium. En el proyecto se embarcaron la danesa Nordisk Film Production A/S y la alemana Zweites Deutsches Fernsehen (ZDF).

En un principio sólo se había planteado el estreno en cines de la primera entrega de la trilogía concebida por Stieg Larsson: Los hombres que no amaban a las mujeres [+lee también:
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ficha de la película], de Niels Arden Oplev. Sin embargo, el éxito de público indujo la adaptación a la gran pantalla de La chica que soñaba con una cerilla y un bidón de gasolina y La reina en el palacio de las corrientes de aire, ambas dirigidas por Daniel Alfredson. Las tres películas recaudaron en total más de 163 millones de euros en la taquilla de más de medio centenar de países.

En el CineEurope de este año (conocido anteriormente como CineExpo), celebrado en Amsterdam el 30 de junio, la productora de Stærmose recibió el premio al mayor logro en la taquilla europea. La última vez que una emisión televisiva sueca recibió un EMMY fue en 1998. Entonces el director sueco Lars Molin se coronó por The Tattooed Widow, también de la SVT.

(Traducción del inglés)