28/11/2011

Henry Kenneth Alfred Russell, más conocido como Ken Russell, murió el pasado domingo mientras dormía a la edad de 84 años. El seminal y controvertido realizador británico deja atrás una obra excepcional y ecléctica compuesta por 71 títulos repartidos entre cine, televisión, documental y vídeo. Russel fue un auténtico renacentista: formó parte de las fuerzas aéreas y de la marina mercante y trabajó en el mundo de la danza y de la fotografía antes de comenzar a trabajar para la televisión.

Tras una innovadora carrera en la pequeña pantalla, Russell firmó en 1963 su ópera prima; la comedia French Dressing, la versión británica de Y Dios creó la mujer, de Roger Vadim. A ella siguió la película de espías El cerebro de un millón de dólares (1967), protagonizada por Michael Caine. Sin embargo, fue la adaptación del clásico de D.H. Lawrence Mujeres enamoradas (1969) la que le hizo saltar a la fama mundial. Al margen de su intelectual representación de la tumultuosa segunda mitad de los años 60, la película se hizo famosa por mostrar los genitales masculinos de un actor en la célebre escena de la pelea de lucha libre. Russell consiguió su única candidatura al Oscar al mejor director por esta película.

Tras la biografía de Chaikovski La pasión de vivir (1970), Russell firmó la que está considerada su película más controvertida: Los demonios (1971). Su retrato sin tapujos del sexo en el seno de la Iglesia fue tan elogiado como vilipendiado. Resulta irónico que el British Film Institute haya anunciado que el DVD será comercializado por primera vez en marzo de 2012, cuarenta años después de su estreno. Gracias a ella, Russell se llevó en 1972 el Nastro de Plata al mejor director.

Entre sus siguientes trabajos destaca Viaje alucinante al fondo de la mente (1980), su única incursión en el cine de ciencia ficción. Russell pasó sus últimos años en el mundo de la ópera y de la televisión.

(Traducción del inglés)