Hamburg Animation Award: El ganador, el cocinero y la sorpresa final
por Birgit Heidsiek
- 129 cortos de animación de escuelas de once países fueron presentados a esta competición. Johannes Schiessl, de la escuela Filmakademie Baden-Württemberg, se llevó el primer premio
Por novena ocasión, el certamen Hamburg Animation Award ha llevado a diseñadores creativos emergentes de todo el mundo hasta el norte de Alemania. 129 cortos de animación de escuelas de once países fueron presentados a esta competición, cuya ceremonia de entrega de premios se celebró en el Schmidts Tivoli, situado en el célebre barrio rojo de Hamburgo.
“Las técnicas de animación son usadas cada vez más en el cine, la publicidad y la industria de los videojuegos”, ha explicado Thomas M. Schünemann, de la Cámara de Comercio de Hamburgo, que ha organizado este evento en colaboración con la escuela de animación de la ciudad en 2003. “Se trata de una plataforma para talentos emergentes, que consiguen de este modo atraer la atención internacional”.
Diez finalistas llegados de Alemania, el Reino Unido, Dinamarca, China y Nueva Zelanda compitieron por los premios de las cuatro categorías. El jurado estaba liderado por Harald Siepermann, diseñador de personajes de Walt Disney Feature Animation.
El estudiante Johannes Schiessl, de la escuela Filmakademie Baden-Württemberg, se llevó el primer premio, dotado con 5.000 euros, por 366. “El peculiar diseño, una animación muy efectiva y el tono melancólico funcionan a la perfección”, ha explicado Christian Schellewald, director de arte en DreamWorks Animation. Como bonus adicional, el ganador se llevó el programa de composición Fusion.
El premio Innovative Design, dotado con 3.000 euros, fue a parar a la danesa The Animation Workshop por la expresiva película Load, en la que un envío de panfletos se convierten en una carga física y psicológica.
El poco convencional drama A Life Well Seasoned, de Daniel Rieley, obtuvo el premio del país patrocinador, Reino Unido, valorado en 2.000 euros. El premio del público fue para la divertida Bootyful, de los estudiantes de animación de Hamburgo Maret Collet y Mareikje Kersting. La sorpresa final fue protagonizada por el cocinero alemán de televisión que prestó su voz a uno de los personajes de Ratatouille, Tim Maelzer, que donó 10.000 euros para que el resto de candidatos no se fuesen del evento con las manos vacías.
(Traducción del inglés)
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