21/06/2012 - Cinco años después de su accidentado rodaje en Haugesund, la comedia negra del británico Robert Young llega a la cartelera noruega, pero la maldición continúa

Tres semanas después de su estreno, Wide Blue Yonder, dirigida por el británico Robert Young y protagonizada por Brian Fox, James Fox y Lauren Bacall, ha desaparecido de los cines noruegos a excepción de uno, tras alcanzar la decepcionante cifra de 1.042 espectadores para el distribuidor Europafilm. Esta comedia negra sigue siendo proyectada en el cine Edda de Haugesund, sede del Festival Internacional de Cine de Noruega, ciudad donde fue rodada hace cinco años.

Los problemas del Fracaso Wide Blue, como la conoce la prensa local, empezaron ya durante el rodaje, cuando los productores, el británico John Cairns (Parkland Films) y el noruego Bjørg Veland (Euromax), fueron incapaces de pagar sus facturas, incluyendo el salario del reparto y los técnicos. Habían conseguido solo 2,4 millones de euros de los 6,4 que componían el presupuesto de la película.

El productor noruego Bjarne Hareide se unió al proyecto para ajustar la financiación, pero cuando el rodaje se dio por cerrado, aún faltaban por pagar servicios por valor de 1,6 millones de euros. Eran necesarias nuevas inversiones para terminar la película, que fue presentada en una gala repleta de estrellas en el Festival de Haugesund en 2010. Fueron necesarios otros dos años para aclarar el tema de los derechos, que se complicó más aún con la bancarrota del productor británico.

Concebida para el teatro por el dramaturgo británico Hugh Janes y representada en el West End londinense con Eric Skyes como protagonista, la película, cuyo guión ha sido adaptado por el mismo Janes, narra la historia de dos marineros retirados, ex compañeros, que viven en una residencia para ancianos en Noruega. Un día, Wally encuentra a Skipper muerto y quiere llevar sus restos al mar, como antiguamente y según le había prometido. Pero el gerente de la residencia tiene otros planes.

(Traducción del inglés)