12/09/2012 - El director todoterreno Vincent Lannoo descubre nuevos territorios en Little Glory, una inesperada reinterpretación social del movimiento adolescente estadounidense

Vincent Lannoo nos tenía acostumbrados a otra cosa: un mundo de bromas trágicas, parodias, ácidas parodias, de bufones presuntuosos y perdedores poco magníficos. Por ello, Little Glory [+lee también:
tráiler
ficha de la película], crónica melancólica de una adolescencia echada a perder en unos Estados Unidos poco cinematográficos, sorprenderá a propios y extraños.

Un rostro de ángel, especie de eco fantasmagórico de la figura de James Dean, atraviesa la pantalla e imprime a la historia un ritmo indolente, casi plomizo, producto de una vida cotidiana hecha de repeticiones. Shawn no va a la escuela, ha dejado su trabajo, juega a videojuegos y sale con chicos sin mucha picardía pero muy violentos. Vive con su padre, un albañil alcohólico, y su hermana pequeña, diez años menor. Su madre acaba de morir, y, a pesar de su apariencia bravucona, Shawn no sabe cómo cortar ese cordón, roto demasiado pronto. El padre, con una cerveza de más, cae por las escaleras y muere. Aunque Shawn acepta con fatalidad la última renuncia de su padre, no es consciente en lo inmediato de las nuevas responsabilidades que tiene sobre sus hombros: podría convertirse en el tutor legal de su hermana. Ella y Shawn se ayudarán mutuamente, crecerán juntos y aprenderán que a veces tomar la decisión correcta es saber renunciar.

El guión original de Little Glory es obra de François Verjeans. Los productores, Vincent Lannoo y John Engels, se propusieron llevar la historia al otro lado del atlántico, a unos Estados Unidos que rara vez aparecen de este modo en la pantalla: un país ni pobre ni rico, que no es el de la clase media que puebla los suburbios, ni el de los ruidosos centros urbanos, ni el de los trailers parks white trash. La apuesta es atrevida y suma otro tanto a la diversidad del cine belga. Little Glory es una producción de Left Field Ventures con el apoyo de CCA, de Wallimage y del Tax Shelter (uFund). Artebis la distribuye hoy en Bélgica en seis cines.

Recordemos que hoy también se estrena en el país centroeuropeo el documental belga Il a plu sur le grand paysage, de Jean-Jacques Andrien.

(Traducción del francés)