31/01/2014 - La película, divertida pero disciplinada a un tiempo, sigue a la realizadora en sus relaciones anteriores, esparcidas por toda Europa

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tráiler
ficha de la película] , primer largometraje de la croata Tatjana Božić, es un documental en primer persona sobre la búsqueda del amor. La película, divertida pero disciplinada a un tiempo, sigue a la realizadora en sus relaciones anteriores y consigue que el espectador se identifique con sus vivencias.

Empezando con su pareja actual, el holandés Rogier, con quien tiene un hijo, y remontándose a sus ex novios de Moscú, Hamburgo, Zagreb y Londres, Božić filma los reencuentros con los hombres con quienes ha mantenido una relación desde hace 18 años. Es el caso de un hombre de Moscú, que le fue arrebatado por una mujer que también se llamaba Tatjana, con quien parece tener una relación muy amistosa (algo frecuente con otras mujeres relacionadas con sus ex parejas, antes o después que ella).

El documental relata una especie de odisea (de hecho, la traducción del título original sería algo así como Odisea sentimental) por la vida amorosa de Božić. Como muchos de nosotros, buscaba el “amor verdadero”, pero la película intenta analizar la cuestión de que es realmente “verdadero” en una relación sentimental. Hasta qué punto tiene sentido la realidad en una relación, y, en cualquier caso, qué es la realidad, cuáles son nuestras expectativas y cuánto se diferencian de la idea del otro de cómo funcionan las cosas.

Por supuesto, no se llega a ninguna conclusión clara. No hay soluciones sencillas, a no ser que se siga el consejo de una amiga suya de Rusia, autora de siete libros de autoayuda sobre el amor, que nos aportan algunas de las frases más divertidas de la película. Aunque quizás Božić haya encontrado sin darse cuenta parte de la solución: su relación con Rogier, que parecía perfecta al inicio pero que parece haberse estancado ahora que tienen un hijo pequeño, sigue funcionando. Rogier le presta una mano en la película y los Países Bajos ofrecen muchas facilidades para las parejas separadas con hijos.

El hecho de que la directora sea croata y hable de novios de todos los rincones de Europa proporciona material muy pertinente sobre las diferencias culturales del continente y otorga a la cinta un aire más internacional, pero no menos relevante, que su tema principal. Es una película muy personal y abierta al mismo tiempo, por lo que debería lograr hacerse con un hueco incluso fuera del circuito de festivales, si logra dar con la distribuidora adecuada.

Happily Ever After was co-produced by the Netherland's IKON and JwdV Film and Croatia's Factum.

(Traducción del inglés)