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PELÍCULAS / CRÍTICAS Tanzania / Irlanda / Suiza

Crítica: Samira’s Dream

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- El documental de Nino Tropiano presenta un relato sincero sobre la vida de Samira, que sueña con convertirse en una mujer independiente gracias a la educación

Crítica: Samira’s Dream

El nuevo documental de Nino Tropiano, titulado Samira’s Dream, cuenta una historia simple, pero rica en honestidad. La película se ha presentado recientemente en el Festival Internacional de Zanzíbar (del 20 al 25 de julio). Como socio del evento africano, Cineuropa organizó varias proyecciones en pueblos de la zona, así como debates sobre el papel de la educación en el empoderamiento de las mujeres tanzanas.  

Durante los dos últimos años, el documental de Tropiano se ha presentado en unos 20 festivales, entre ellos Festival de Matera, la Semana del Cine de Camerún, el IFI de Irlanda y el Festival de Roma. Formado en la IADT de Dublín, antes de trabajar en este largometraje, Tropiano dirigió otras obras de no ficción, como Chippers y My Daughter Makes the Madonna.

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En Samira’s Dream, el director nacido en Monopoli decide seguir a la mujer veinteañera del título, que vive en Nungwi, un pequeño pueblo de pescadores de la isla de Zanzíbar. Samira creció en una sociedad musulmana estricta, nos enteramos de que su encuentro con Samira ocurrió casi por casualidad, cuando un grupo de mujeres locales acordaron compartir sus historias. Ese encuentro casual dio lugar a un intenso trabajo de investigación que duró siete años de su vida.

Samira, en oposición a muchas mujeres tanzanas de su edad, sueña en grande y desea convertirse en una mujer independiente. Obviamente, no ve conflicto entre conseguir la realización personal, y ser madre y esposa. Cree en el poder de la educación para alcanzar el conocimiento, la conciencia y la independencia económica. Algo que es normal y razonable en la sociedad occidental la hace revolucionaria en el contexto patriarcal y conservador en el que vive. Y este es el hilo conductor del documental de Tropiano: cuenta una historia de empoderamiento que retrata a Samira, paso a paso, mientras toma las riendas de su vida. 

Además de algunas intervenciones en voz en off que permiten a Tropiano interconectar escenas sin complicaciones y proporcionar un mínimo de contextualización, el director y sus dos directores de fotografía —Vittoria Fiumi y Pina Mastropiero— adoptan un enfoque contemplativo, que accede a los lugares de la vida de Samira con discreción, pero también con gran intimidad. A pesar de albergar una pluralidad de voces, el foco principal de la película reside en la joven, que poco a poco se convierte en protagonista de una parábola edificante a medida que crecen sus ambiciones, junto con las batallas que tiene que librar y los demonios de su pasado. En este sentido, un aspecto crucial en la vida de Samira es el fallecimiento prematuro de su madre y la relación distante que mantiene con su padre, quien, después de haber perdido a la madre de Samira, se casó dos veces.

La escena final, grabada en enero de 2021, es gratificante para los espectadores, pero sobre todo para la propia Samira, que se convierte en una parte activa de un virtuoso círculo que puede dar a las mujeres tanzanas nuevas y necesarias esperanzas. Al final, el documental de Tropiano consigue su misión: cuenta una interesante biografía, pero también recuerda al espectador la importancia de la educación para luchar por la libertad y la prosperidad. Es un mensaje universal que puede emocional a cualquiera, y así lo hace esta película.

Samira’s Dream ha sido producida por la compañía con sede en Dublín Fall Films y coproducida por la suiza Framevox, con el apoyo del Simon Cumbers Media Fund de Irlanda, el programa Creative Europe - MEDIA de la Unión Europea y la embajada suiza en Tanzania.

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(Traducción del inglés)

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