email print share on Facebook share on Twitter share on LinkedIn share on reddit pin on Pinterest

ARRAS 2022

Crítica: After the Winter

por 

- El montenegrino Ivan Bakrač hace gala de un sutil y muy prometedor talento con un primer largometraje sobre cinco amigos de la infancia a punto de convertirse en adultos

Crítica: After the Winter
Maja Šuša y Momcilo Otaševic en After the Winter

“Mi amigo, cuando siento pena, no me dice te quiero. Yo sé que eso le cuesta. Entonces, me escucha. Yo sé que me escucha y me mira. Yo sé que me comprende”. Este fragmento de un poema de Chantal Abraham, que se cuela en una secuencia anodina de un colegio de educación primaria en After the Winter [+lee también:
tráiler
entrevista: Ivan Bakrač
ficha de la película
]
, de Ivan Bakrač, podría resumir a la perfección la esencia del primer largometraje del cineasta montenegrino si le añadimos un fragmento de El fuego fatuo, de Louis Malle, presentado también de manera subrepticia (fuera de cámara, en la televisión): “No puedo extender las manos, no puedo tocar las cosas. Y cuando toco las cosas, no siento nada”. En este nebuloso punto intermedio emocional, en la vacilación que separa la juventud del inicio de la edad adulta, oscilan los cinco amigos descritos con una gran sutileza por el director en una película estrenada el año pasado en Karlovy Vary y proyectada hoy en la sección Visions de l’Est del 23º Festival de Arras.  

(El artículo continúa más abajo - Inf. publicitaria)

Jana (Ivona Kustudic), Marija (Ana Vuckovic), Mladen (Momcilo Otaševic), Danilo (Petar Buric) y Bubi (Maja Šuša) son niños de la pequeña ciudad montenegrina de Nikšić. Unidos desde siempre como los cinco dedos de una mano, son estudiantes rezagados que encadenan pequeños trabajos para retrasar el salto a la evolución de sus vidas y disfrutar de la embriaguez cómplice de la postadolescencia (los festivales de música, la natación, las noches en las discotecas, etc.). Pero también hay amor con la necesidad o no de comprometerse, las facilidades de unos y las dificultades de otros, las tristezas y las sorpresas. Todo ello sin olvidar a la familia (y sus secretos del pasado, una capa de plomo y de ley del silencio transmitida por la guerra de los Balcanes hace 25 años) y las tradiciones patriarcales de las que nos hemos alejado, pues los dos chicos comparten un apartamento en Belgrado, Bubi también vive en Serbia, en Novi Sad, mientras que Jana y Marija conviven en el pueblo costero montenegrino de Kotor donde desempeñan trabajos que les permiten sobrevivir. Se llaman por Facetime, se mantienen en contacto, se ríen, hacen bromas, proyectos comunes, se acompañan para volver a su ciudad natal (tomando atajos), dejan el espacio a los demás o van a apoyarlos cuando es necesario.

El cineasta declina esta amistad en tres tiempos (durante casi un año), primero entre las chicas (Jana y Marija), luego entre los chicos (Mladen y Danilo), y por último entre chicas y chicos (Mladen y Danilo con Jana y Marija, y luego Bubi y Mladen antes de que los cinco amigos dejen de reunirse en Nikšić). Una inestabilidad existencial que la película esboza con precisión, creando un retrato generacional donde cada uno de los protagonistas desarrolla una verdadera identidad, en una gran variedad de escenarios (la segunda parte parece una road movie) y de atmósferas. Pero After the Winter también presenta un director muy sutil, que teje (bajo una agradable ligereza) su red con pequeños toques discretos y delicados, en planos (sin ninguna ostentación) magistralmente compuestos (Dusan Grubin en la dirección de fotografía) y numerosos detalles sugestivos. Múltiples cualidades enmascaradas con habilidad y elegancia que hacen de Ivan Bakrač un cineasta a seguir muy de cerca. 

After the Winter ha sido producida por las montenegrinas Artikulacija y ABHO Film, con las serbias Biberche Productions y Akcija Produkcija, la croata Maxima film y la francesa Arizona Films Productions (que también gestiona las ventas internacionales).  

(El artículo continúa más abajo - Inf. publicitaria)

(Traducción del francés)

¿Te ha gustado este artículo? Suscríbete a nuestra newsletter y recibe más artículos como este directamente en tu email.

Privacy Policy