02/02/2023 - La película de Andreas Öhman es una atinada aproximación a lo más luminoso y a lo más oscuro de las dinámicas familiares, reforzada por unas sólidas interpretaciones de carne y hueso y de animación

La vuelta a casa es el tema central de la sección Focus de este año en el Göteborg Film Festival, y en ella se ofrece un total de 11 reinterpretaciones sobre “los sentimientos del hogar en el mundo contemporáneo”. En One Day All This Will Be Yours [+lee también:
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entrevista: Andreas Öhman
ficha de la película], de Andreas Öhman, el hogar está encarnado por el norte de Suecia, realista y rural, y así lo percibe su protagonista, Lisa, que ha cambiado aquello por el bullicio bohemio de Estocolmo, otro destino nacional igualmente valioso que convive en una aparente armonía con el entorno rural.

Öhman, que en 2010 llamó poderosamente la atención con su ópera prima, Simple Simon [+lee también:
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ficha de la película], preseleccionada para los Óscar, ha encontrado un nicho en sus coloridas representaciones de personalidades poco convencionales, fusionando rasgos de la tradición independiente estadounidense con un sincero sentimiento escandinavo. La potenciación puntual mediante la interacción entre personajes animados y personajes de carne y hueso (al menos en la imaginación de estos últimos) otorga incluso más peso a Öhman en su propio territorio. En la escena inicial percibimos ya una suculenta muestra de su oficio cuando en la bañera de Lisa aparece un espumoso entrometido y empieza a espetar opiniones que nadie ha pedido. Lisa, reconocida dibujante “alternativa” que publica una tira cómica de éxito, trabaja contrarreloj en la edición de un libro de obras originales, si bien le está costando lograr esa originalidad, lo que frustra a su editor/exnovio (y divierte al descarado hombre de espuma). Y por si la situación no fuera suficientemente tensa, los padres de Lisa han convocado a todos sus hijos para comunicarles algo importante en el hogar familiar, sin darles más pistas. Con la cabeza cansada y el corazón encogido (y con el plazo de entrega sobre su cabeza, como una espada de Damocles), Lisa inicia el viaje para hacer frente a la noticia, a la familia y, por supuesto, a ella misma. Como es habitual en muchos de estos relatos de regreso a casa, siempre hay cuestiones sin resolver acechando desde las profundidades del bosque.

El anuncio tiene que ver con el aserradero que construyó el padre de Lisa con sus propias manos y que ahora quiere traspasar a sus hijos, que son Lisa, su hermana mayor, Josefine, y su hermano, Håkan, una amalgama algo discordante de personalidades, ninguna de ellas interesada en la oferta ni, ya de paso, en socializar. No tardamos en descubrir que la familia esconde una experiencia traumática común por la pérdida de un cuarto hermano, especialmente dolorosa para Lisa porque ella estaba presente en el momento de los hechos. En el papel principal encontramos a Karin Franz Körlof, que bien podría ser “la peor persona del mundo” de este año y que quizá quiera marcarse en su calendario los premios Guldbagge de 2024. El resto de las interpretaciones son sólidas en esta meticulosa y entrañable aproximación a una historia familiar de dinámicas ocasionalmente disfuncionales pero fundamentalmente afectuosas. El guion de Öhman navega impecablemente entre claroscuros, y a veces entre matices directamente ridículos. Un cangrejo de río que interpreta una alegre cancioncilla sobre el cáncer en un falso danés se lleva la palma.

One Day All This Will Be Yours es una producción de Grand Slam Film Production (Suecia).

(Traducción del inglés por Marcos Randulfe)