Crítica: La primavera della mia vita
por Camillo De Marco
- El dúo musical Colapesce & Dimartino protagonizan una road movie a través de una Sicilia bellísima y no convencional, entre gags, autoparodia, enlaces de amistad y árboles cósmicos

En la estela del Festival de Sanremo, el evento musical retransmitido en todo el mundo en el que Colapesce & Dimartino firmaron una gran participación (galardonados con el premio de la crítica y el premio Lucio Dalla por su nueva canción Splash), Vision Distribution estrena La primavera della mia vita [+lee también:
tráiler
ficha de la película] —una película escrita y protagonizada por el dúo artístico siciliano— como el evento estrella disponible en los cines italianos del 20 al 22 de febrero.
La idea que subyace tras la película es la de suscribir un cine ligero, o "ligerísimo" (parafraseando su exitosa canción Leggerissima del verano de 2021), pero brillante, que sin duda se basa en Big Fish, de Tim Burton. El resultado ha sido una elegíaca road movie ambientada en una radiante versión de Sicilia que sigue las huellas de las leyendas de la isla, incluso a través de las ideas más inverosímiles, como la afirmación de que William Shakespeare nació en Mesina pero huyó a Stratford-upon-Avon para escapar de la Santa Inquisición.
Escrita por el dúo junto con Michele Astori y el director debutante Zavvo Nicolosi (editor de vídeos que codirigió el videoclip de “Splash”), La primavera della mia vita constituye una continuación por otros medios de la poética musical de Colapesce & Dimartino, y expresa una sicilianidad actual, teñida de la frescura de quienes han adornado la escena indie regional año tras año. Además, la película también contiene autocrítica en un tono burlesco, un desencanto que en ocasiones se traduce en desilusiones y una irresistible atracción retro por un pasado lleno de mitos y personajes extraordinarios.
En esta historia, que esconde tras de sí una autobiografía satírica, Antonio (Dimartino) abandona a su socio Lorenzo (Colapesce) en la cima de su éxito, en plena gira y con un nuevo álbum en ciernes, y todo por una repentina crisis existencial del primero. No obstante, la razón por la que este Antonio electrizado ha vuelto es para ofrecerle algo enorme y misterioso que va mucho más allá de la música. Lorenzo, que etiqueta los ansiolíticos según la ocasión ("para una noche con amigos aficionados a Springsteen"), toma inmediatamente uno etiquetado como "para las sorpresas de Antonio", porque "el entusiasmo esconde el germen del fracaso".
La idea de Antonio es escribir un libro sobre leyendas sicilianas en nombre de una autodenominada Antigua Orden de los Seminitas, una secta que predica que se debe devolver a la Naturaleza lo que le hemos quitado, y de la que Antonio se ha hecho miembro. Los dos inician su aventura en un Ford Taunus SW naranja chillón de los años 70, recorriendo una versión hermosa y poco convencional de Sicilia en busca de pruebas irrefutables de la existencia los Lestrigoni (gigantes antropófagos), la estatua de Garibaldi que llora sangre, la tetera más grande del mundo, la isla donde hornean pan alucinógeno y el bisnieto de Shakespeare. Por el camino se producen una serie de peculiares encuentros, como el coro de albinos, el club de adoradores de Jim Morrison, la organización de "experiencias mafiosas" para turistas alemanes y las hermanas de la Orden de los Buzos. Madame, Roberto Vecchioni, Brunori Sas, Erland Øye y La Comitiva son algunos de los invitados especiales que aparecen en la película.
Partiendo de una estética de videoclip musical e incluyendo breves secuencias rodadas con cámara fija que siempre terminan con una broma de uno de los dos protagonistas, la película se presenta como una variación edulcorada y colorista —como si fuera una cassata siciliana con fruta confitada— del cine grotesco y cínico de los directores sicilianos Ciprì y Maresco. Detrás de gags sencillos, el dúo canaliza un poco de languidez mediterránea e incertidumbre existencial, además de explorar las crisis creativas y la amistad. Por no hablar de la urgente necesidad de conectar con el árbol cósmico.
La primavera della mia vita ha sido producida por Wildside, que forma parte de Fremantle, junto con Vision Distribution, en coproducción con Sugar Play, que a su vez colabora con Sky.
(Traducción del italiano)
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