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PELÍCULAS / CRÍTICAS Francia

Crítica: Mi camino interior

por 

- La película de Denis Imbert basada en la autobiografía del escritor y explorador Sylvain Tesson demuestra, sin una originalidad particular, cómo la naturaleza puede reparar heridas profundas

Crítica: Mi camino interior
Jean Dujardin en Mi camino interior

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(que recibió el Premio del Jurado en Cannes, fue nominada a 14 premios David di Donatello y alcanzó una recaudación de más de 6 millones de euros en la taquilla italiana) fue el pistoletazo de salida para muchos productores y distribuidores, que comenzaron a buscar historias de grandes hazañas en las alturas, relatos que alcanzan altas cotas en la búsqueda de uno mismo y que celebran la belleza del mundo. El Festival de Cine de Trento, referente indiscutible del cine de montaña desde 1952, tomó una sabia decisión a la hora de escoger la película inaugural de su 71.ª edición (celebrada del 28 de abril al 7 de mayo). Protagonizada por el oscarizado Jean Dujardin, Mi camino interior, de Denis Imbert, lleva tres semanas en los cines franceses de la mano de Apollo Films (con cerca de 900.000 espectadores hasta la fecha) y ha sido adquirida por Wanted Cinema, que la distribuirá en Italia a partir del mes de octubre.

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La película es una adaptación libre de la novela autobiográfica homónima escrita por el francés Sylvain Tesson, un conocido apasionado de las experiencias extremas y los viajes en solitario, que anteriormente protagonizó El leopardo de las nieves [+lee también:
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(ganadora del premio César al mejor documental en 2022). Dujardin se mete en la piel de Pierre, un famoso explorador y escritor en busca de aventuras, que una noche sufre un accidente que casi acaba con su vida. Cuando despierta del coma, se promete a sí mismo que volverá a salir de viaje, esta vez para atravesar a pie su Francia natal, desde Mercantour hasta Cotentin, recorriendo caminos olvidados (¡un total de 1.300 kilómetros!). También se trata de un viaje interior, con el objetivo de dominar y retomar el control de un cuerpo destrozado.

En realidad, la película de Imbert (su tercer largometraje como director, tras una comedia, una película de aventuras para niños y una serie de televisión familiar), coescrita con Diastème, aspira a demostrar cómo el contacto directo, absoluto, exclusivo e impermeable con la naturaleza puede curar y aliviar heridas profundas, así como “cerrar capítulos negativos” de nuestras vidas, como se afirma en la película. Y lo consigue, a pesar de no ofrecer nada nuevo ni especialmente rompedor a nivel cinematográfico, e incluso consigue esquivar el estereotipo de postal de una Francia acogedora y turística.

El protagonista no es particularmente agradable, y su comportamiento gascón acaba provocándole una caída (no demasiado impresionante) desde una ventana, que le deja con huesos rotos y cicatrices desagradables en la cara. La gente le mira con incomodidad, lo que a fin de cuentas le aporta más humanidad a este hombre que ahora sufre ataques epilépticos. A medida que atraviesa este terreno accidentado, inhóspito, pero hermoso (“ultra-rural”), acompañado en varios momentos por amigos (Jonathan Zaccaï), compañeros errantes de aventuras (Dylan Robert) y su hermana (Izïa Higelin), Pierre se centra en sí mismo y escribe en su cuaderno frases que ningún editor con sentido aceptaría (“Una novia que nunca decepciona: la libertad”). De hecho, como un personaje individualista, ecologista, antiprogresista y escapista, la prosa de Tesson resulta a menudo autocomplaciente (“Napoleón decía que hay dos tipos de hombres: los que mandan y los que obedecen. Se olvidó de los que escapan. Escapar es mandar. Mandar sobre tu destino para que deje de dominarte”). Sin duda, está muy lejos de la simplicidad valdense de Hacia rutas salvajes, de Sean Penn.

Sin embargo, el Pierre de Jean Dujardin también se muestra abierto a encuentros casuales y fugaces que pueden enriquecerle, ya sea un hombre en la plaza de un pueblo, una joven pastora en las montañas o Yves, un auténtico habitante de Aubrac. Por otra parte, en una demostración de genio por parte del director, la película es prácticamente un documental, que acoge reflexiones sobre temas de actualidad como la despoblación de las pequeñas ciudades de montaña y la falta de trabajo en el rural.

Sur les chemins noirs es una producción de Radar Films, coproducida por TF1 Studio, La Production Dujardin - JD Prod, Apollo Films, Echo Studio, France 3 Cinéma y Auvergne Rhône Alpes Cinéma. Newen Connect se encarga de las ventas internacionales.

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(Traducción del italiano)

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