email print share on Facebook share on Twitter share on LinkedIn share on reddit pin on Pinterest

HOT DOCS 2023

Crítica: A Happy Man

por 

- En la tierna película de Sona G. Lutherová, "nadie es perfecto", y eso está perfectamente bien

Crítica: A Happy Man

Cuando amas a alguien, ¿qué es exactamente lo que amas? ¿Su personalidad, su inteligencia, su cuerpo? A veces son todas estas cosas, pero la vida cambia a la gente. Las personas enferman y envejecen. Incluso se quedan embarazadas y puede que ya no sean las mismas. ¿Significa eso que el amor debe acabarse o, por el contrario, debe intentar adaptarse?

La directora Sona G. Lutherová parece reflexionar sobre ello, después de ser testigo de cómo dos de sus amigos se encuentran de repente en medio de un enigma similar. Llevan mucho tiempo casados y tienen hijos, pero Marvin ha decidido salir del armario como hombre trans y está dispuesto a llegar hasta el final. Pronto, empieza a tener un aspecto diferente, a afeitarse y a roncar. Sin embargo, su marido no va a ninguna parte y sigue agarrando su mano mientras ven la televisión por la noche.

(El artículo continúa más abajo - Inf. publicitaria)

A Happy Man [+lee también:
entrevista: Soňa G. Lutherová
ficha de la película
]
, estrenada mundialmente en el festival canadiense Hot Docs, como parte del programa The Changing Face of Europe de la European Film Promotion, presenta una visión sorprendentemente sosegada de la transición. Aunque, como era de esperar, hay mucho en juego y no todo está exento de drama: a los padres de Marvin (especialmente a su madre) les cuesta más acoger a este hombre en sus vidas, y hay escenas realmente tensas en las que vemos a gente que intenta parecer relajada cuando no lo están en absoluto. Hay algo muy pragmático en este dilema, donde una pareja se esfuerza al máximo, aun siendo plenamente conscientes de que al final podría no funcionar. Pero, ¿y qué? Al menos no se rindieron de inmediato, lo cual ya es una victoria. Intentarlo está infravalorado, probablemente debido a la célebre frase de Yoda (“Hazlo o no lo hagas, pero no lo intentes”). En este caso, se trata más de un gesto de amor y compromiso.

Con algunas escenas filmadas por el propio Marvin durante momentos importantes (“Acabo de afeitarme y me voy a tomar una copa con un amigo”, afirma alegremente en un momento dado), las cosas se vuelven muy íntimas. También hablan de su sexualidad, o de su posible desaparición. “Hemos acordado que no volveré a tocar la parte de su cuerpo que está cambiando”, admite su marido. Sin embargo, Lutherová siempre se centra en lo cotidiano, en los niños que reclaman atención, en el ritual de vaciar el lavavajillas.

Gracias a este enfoque, esta pequeña y humilde película va más allá de la transición de Marvin, ofreciendo una historia sobre una familia normal y corriente que resulta sorprendentemente universal, y quizá también sobre lo que realmente importa cuando la gente decide compartir sus vidas. “Hacemos buena pareja y disfrutamos juntos”, dicen los protagonistas. ¿Quién sabe? Quizá sea así de sencillo.

Curiosamente, en su casa hay colgado un póster de Con faldas y a lo loco, en la que Jack Lemmon se comprometía con un millonario que estaba convencido de que era una mujer. Al final confiesa, pero no es rechazado. “Bueno, nadie es perfecto”, le responde. Podría ser un amuleto de buena suerte para esta pareja, un recordatorio de que, si es necesario, el amor también puede ser flexible. En cualquier caso, es hora de quitarse esa peluca.

A Happy Man es una coproducción entre Eslovaquia y República Checa, a cargo de Azyl Production y HBO Europe.

(El artículo continúa más abajo - Inf. publicitaria)

(Traducción del inglés)

¿Te ha gustado este artículo? Suscríbete a nuestra newsletter y recibe más artículos como este directamente en tu email.

Privacy Policy