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LOCARNO 2023 Cineasti del presente / Zabaltegi-Tabakalera

Crítica: Camping du Lac

por 

- Eléonore Saintagnan firma un diario que se deja superar por la ficción para explorar los relatos de iniciación de un territorio que libera su imaginario

Crítica: Camping du Lac
Eléonore Saintagnan en Camping du Lac

Formada como documentalista en Lussas antes de pasar una temporada en Le Fresnoy, Eléonore Saintagnan se encuentra actualmente en una fase de consolidación de su carrera, caracterizada por la hibridez entre el cine documental o experimental y las artes plásticas. Su mediometraje Une fille d'Ouessant se proyectó en numerosos festivales, entre ellos Visions du Réel, donde ganó el premio al mejor cortometraje. Y en su nueva película, Camping du Lac [+lee también:
tráiler
entrevista: Éléonore Saintagnan
ficha de la película
]
, seleccionada para la sección Cineasti del presente del Festival de Locarno, lleva su enfoque documental al terreno de la ficción, relaciona la realidad con relatos míticos y recurre tanto a la hagiografía como a las leyendas populares.

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Al principio era la palabra. "Tengo que contarte una historia muy graciosa", afirma la voz en off de la narradora/directora de una película que comienza como un diario de viaje e inmediatamente deja entrever su predilección por todo lo extraño. Eléonore necesita ver el mar, así que se sube a su coche y toma rumbo al oeste, pero su veloz coche la deja tirada en medio del campo, como para impedirle dar vueltas en círculo. Se encuentra atrapada, víctima de una avería forzosa, justo en el corazón de Bretaña. Detenida en el refugio temporal de una casa móvil, se deleita con las vistas de un lago, ya que el mar ya no es una opción. Al cruzarse por casualidad con los habituales del camping, redescubre sus viejos hábitos de la infancia, remontándose a la época en la que pasaba horas observando a sus vecinos.

Sus peregrinaciones la adentran cada vez más en las tierras del lago Guerlédan, pero también en su propia imaginación, invocando la memoria de Saint Corentin, el hombre que hablaba con su pez, para ofrecernos una hagiografía deliciosamente artesanal. Siguiendo sus pasos, la historia nos catapulta a un tiempo nuevo y espeluznante en el que las criaturas y los monstruos legendarios tienen cada uno su lugar. Las orillas del lago se convierten en lugar de peregrinación y recuperan un brillo turístico como hacía tiempo que no veía la región.

Equipada con su cámara para captar los sonidos de la naturaleza —y las conversaciones de sus vecinos—, Eléonore —a la vez heroína y directora— inicia un proceso de amplificación de la realidad. Todo está sujeto a la ficción, de manera que se plantea la pregunta de siempre: ¿y si...? La estética de la película es lúdica e improvisada, en la línea de los juegos de la infancia, y se consigue aprovechando con picardía todo lo que se tiene a mano: una cantante rural, un lago seco por aquí, fuegos artificiales por allá...

Eléonore Saintagnan explora el delicado arte de la fábula —tanto la suya  como la de sus vecinos, que reescriben su historia en función de sus esperanzas y defectos— a través de una economía de medios que da alma a la historia y contribuye a hacerla lo más tangible posible en su encantador mundo de fantasía.

Camping du Lac es una producción de Michigan Films (Bélgica) en coproducción con Ecce Films (Francia), que también se encarga de las ventas internacionales. La película forma parte de una serie de proyectos apoyados por la iniciativa de producciones ligeras, supervisada por el Centro de Cine de la Federación Valonia-Bruselas.

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(Traducción del francés)

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