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LOCARNO 2023 Fuera de competición

Crítica: 5 Hectares

por 

- La directora francesa Émilie Deleuze presenta a un cincuentón en busca de su paraíso particular, tan obstinado que pone en peligro todo lo que tiene

Crítica: 5 Hectares
Lambert Wilson en 5 Hectares

Franck (Lambert Wilson), el protagonista, es un hombre aparentemente "perfecto": tiene un prestigioso trabajo como investigador científico y una esposa brillante (Marina Hands) con la que disfruta de un ajetreado pero cómodo día a día. Lo único que parece faltar para completar su vida idílica son los hijos. Sin embargo, casi de la noche a la mañana, le da el venazo y pone en peligro todo lo que tiene al embarcarse en una aventura que a priori parece venirle grande: comprar cinco hectáreas de tierra en Lemosín. Presentada como estreno mundial fuera de competición en el Festival de Locarno, 5 Hectares [+lee también:
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es una película en la que se trata de escenificar los tormentos de un hombre que, a pesar de tenerlo todo, se siente vacío por dentro, un hombre desgastado por una máscara social cada vez más opresiva.

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Entretenida pero no por ello superficial, la nueva película de Émilie Deleuze —escrita junto con Marie Desplechin, autora de Le Journal d'Aurore, libro en el que se basó la cineasta para hacer su anterior película, Aurora (Jamais contente) [+lee también:
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— trata sobre la masculinidad, la arrogancia de la gente de ciudad y la extraordinaria capacidad que tienen los agricultores para vivir una vida plena a pesar de las innumerables dificultades inherentes a su vida cotidiana.

Aunque el protagonista no toma la decisión con la idea de abandonarlo todo para convertirse en agricultor (cinco hectáreas es la cantidad mínima de tierra que se necesita para tener siquiera la esperanza de ser aceptado en un entorno rural, y la máxima para evitar intensos niveles de trabajo), tal y como le ocurre a decenas de parisinos (y de gente de otras partes) en busca de sentido, la llamada de la tierra y de una libertad soñada pero nunca perseguida parece ir ganando terreno poco a poco a una realidad caracterizada por las obligaciones laborales y los esfuerzos por mantener viva la llama de un amor que, en el fondo, no hace más que tambalearse.

Convencido de que bastará con comprar una parcela para convertirse en un terrateniente merecedor del respeto de sus vecinos, Franck no tarda en darse cuenta de que es un completo ignorante de las normas tácitas que rigen la vida en el campo. Acostumbrado a conseguir todo lo que se propone (¡con el dinero se puede hacer de todo!), este "campesino de fin de semana" decide comprar lo que cree que le falta para convertirse en un respetado agricultor: un tractor. Su afán por comprar este vehículo, que al final resulta ser un símbolo de estatus, le lleva a adentrarse cada vez más en un paisaje interior misterioso a la par que fascinante, donde las palabras tienen poderes completamente distintos y donde la tierra hay que ganársela. Le acompaña en este viaje iniciático otro habitante de la ciudad (interpretado por Laurent Poitrenaux) que, diez años antes, se dejó llevar también por la pasión por el campo.

Como si encarnaran la versión moderna de Don Quijote y Sancho Panza, ambos unen sus fuerzas con la esperanza de llevar el Santo Grial a casa. Sin embargo, conseguirlo se convierte en una tarea mucho más difícil de lo que Franck imaginaba. A pesar de todo ello, la espera y las dificultades que entraña su viaje, la necesidad de adaptarse a un ritmo marcadamente distinto y el descubrimiento de una realidad en la que el tiempo se dilata y nada es seguro, resultan ser para el protagonista una terapia de choque necesaria que le permite explorar instintos primarios que nunca se había permitido sentir: la ira, la envidia y el deseo desbordado.

5 Hectares constituye una comedia bien calibrada que combina hábil e inteligentemente momentos de humor con reflexiones profundas, como la de la supervivencia de la durísima y cada vez menos valorada profesión de agricultor, entre otras. Cabe mencionar, sin duda, la banda sonora por cortesía de Bobby Gillespie, que envuelve la película en un barniz vintage de lo más pulido y atractivo.

5 Hectares ha sido producida por Ex Nihilo y Demons Productions. Las ventas internacionales corren a cargo de Paname Distribution.

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(Traducción del italiano)

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